Capítulo 49

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El sábado llegó rápidamente, tanto, que ni siquiera se habian dado cuenta de que se quedaron dormidos.

Despertaron por los golpes en la puerta,  y los gritos de tu papá , Helena y Beltrán cantándole el feliz cumpleaños a Gonzalo. Vos sonreiste, y abriste tus ojos, para verlo con la mitad de su cuerpo fuera de la cama.





-¿Que hacen acá los dos?, Pensamos que Gonzalo se escapó-- dijo tu papá y reiste--

-¡Gonzalo! Despertate pedazo de gil -- dijiste moviéndolo, pero efectivamente tus empujones solo eran una caricia. Reiste, y viste a Beltrán subir a la cama para abrazarte-- Le hice una chocotorta, no la quería convidar y lo amenacé para que me diera, estuvimos charlando y se quedó dormido, en fin, no lo pude despertar más-- dijiste y tu padre negó con la cabeza para luego reír-

-¡Gonzalo! ¡Levantate o no hay fiesta en casa!-- dijo y rápidamente pegó un saltito, todos rieron--

-ah...Ya está listo para la joda-- dijo y vos reiste--

-¿porque no me invitaron a comer la torta? -- preguntó tu hermano más pequeño--

-ya estabas dormido mi amor-- dijiste besando su mejilla, el corrió la cara molesto, vos sonreiste--





Gonzalo finalmente se levantó de la cantaron el ' feliz'  cumpleaños para él. Un nudo se te formó en la garganta, al ver que la tradición seguía presente pero con la enorme diferencia de que faltaba tu mamá.


Intentaste alejar ese sentimiento, pero aunque era un poco imposible decidiste solo pensar en cuanto la amabas.


Más tarde, todos se prepararon para ir a almorzar a la casa de tus abuelos, donde los esperaban todo el resto de la familia unida, incluidos tus abuelos de parte de tu madre. Estabas contenta, las reuniones familiares siempre eran un mimo al alma, estabas charlando animadamente con tus abuelos y tu papá, cuando de repente comenzó a sonar tu celular, sonreiste al ver que se trataba de Pepe.

Te levantaste y caminaste hacia el patio.








-¿Hola? -- dijiste--

-Hola hermosa, buen día, buenas tardes-- dijo haciéndote sonreír--


-hola Pepe-- dijiste--

-¿como estás? ¿que andas haciendo? -- preguntó--

- en lo de mis abuelos, por el cumple de Gonza-- dijiste--

- ah, me imaginé, estoy en lo de mamá, sentado en mi ventana y no te veo por ninguna parte -- dijo y sonreiste--

-¿me extrañas? -- preguntaste, medio divertida medio en serio--

-mucho, ¿vos no? -- preguntó --

-mmm un poquito, sí -- dijiste--

-ah, sos mala -- dijo riendo-- me quedo con ese porquito entonces-- dijo y mordiste tu labio inferior-- ¿a que hora volvés? -- preguntó--

-no sé Pepe, ¿por? -- dijiste mientras te sentabas en el pasto--

-quiero verte un ratito-- dijo y sonreiste--

-¿vas a estar ahí? Te aviso cuando llego-- dijiste-- aunque vine en el auto con Gonzalo, puedo dejarlo tirado y voy a verte-- dijiste riendo--

-tentador -- dijo riendo-- pero voy a esperar a que vengas-- dijo y mordiste tu labio inferior-- me quedé con ganas de darte un beso-- dijo--

-yo también Pepe, con muchas ganas-- dijiste--





Los dos siguieron hablando de cualquier cosa, no importaba de qué, pero amabas escucharlo, eras feliz con ese detalle, escuchar y ser escuchada.


Y estabas tan concentrada hablando con él, que ni siquiera te habías dado cuenta de que tu papá estaba parado a tu lado y sonriendote con los brazos cruzados, tu sonrisa se borró y tuviste que despedirte de Pedro rápidamente, tanto que no lo dejaste despedirse.





-papi, ¿que haces ahí? -- preguntaste nerviosa--

-nada, pasaba por acá, y vi a mi princesa sonriendo como nunca, me llamó la atención-- dijo y reiste para acercarte a él y abrazarlo. El besó tu frente-- ¿como se llama? -- preguntó y levantaste la cabeza--

-¿Como se llama quien? -- preguntaste haciéndote la boluda, el río e hincó tu costillas haciéndote pegar un saltito, tenías cosquillas en ese lugar--

-deja de hacerte la boluda, dale, tengo que preparar la escopeta -- dijo y reiste--

-nadie -- dijiste riendo --

-Te voy a hacer cosquillas hasta que me digas. Habla por las buenas o vas a ver-- dijo y reiste para abrazarlo--

-prometeme que no vas a decir nada, ni a volverte loco, ni nada por el estilo-- dijiste--

-¿como se llama? -- preguntó de nuevo--

-Pedro -- dijiste-

-ya tenemos suficiente con uno, que tenemos que bancar a otro-- dijo riendo, pero automáticamente se detuvo-- decime que no es el amigo de tu hermano, decime que no es el vecino-- dijo y te separaste para morder tu labio inferior-- ¡Y mira que le dije que no se haga el vivo eh!-- dijo y vos reiste--

- no seas malo -- dijiste y lo escuchaste suspirar-- veni, te voy a contar--dijiste tomándolo de la mano y llevándolo al sillón enorme que solía ocupar tu abuelo para salir a fumar. El se sentó y vos lo hiciste sobre sus piernas, el sonrió y besó tu mejilla--

- Escucho tus razones para no matarlo, a ver -- dijo y reiste--

-lo quiero-- dijiste y el te miró, con esos ojos azules que te calmaban desde chiquita--

- eso solo me dan ganas de matarlo bien muerto, ¿ya dejaste eso de que yo iba a ser tu único hombre? Que rápido olvidas a papá eh --dijo riendo, vos lo abrazaste--

- anoche se enteró Gonzalo, por eso estaba en mi cuarto, estaba muy enojado pero después entendió, que se yo... Papi, lo quiero desde que tenia doce años, en mi vida imaginé la posibilidad de que algún día se fijara en mí, y ahora es cuando me vengo a enterar de que lo había hecho hace mucho tiempo -- dijiste y el te miró--

- ah, hace rato se está haciendo el vivo entonces-- dijo y reiste--

- lo escuché hablando con Gonza, el estaba por asesinarlo en serio, así que no saben que los escuché-- dijiste-- cuando el se fue, no volví a verlo más digamos, pero cuando volvió... Volvió con todo-- dijiste sonriendo-- te juro que me hace bien, me gusta estar con él, es uno más de ustedes, un cuida más-- dijiste riendo--

-siempre te cuidó de más, ahora me cierra todo, pendejo pelotudo -- dijo riendo y haciéndote reír también--  ya se me hacía que no jugaba a las muñecas con vos por lastima, venía por otro lado la cosa -- dijo recordando cuando tú hemano te hacia llorar, y el venía a jugar con vos--

- sigue siendo así-- dijo y el besó tu mejilla--

-¿entonces? ¿se quieren? -- preguntó--

-Mucho-- dijiste y el suspiró--

-algun día iba a llegar este momento, pero supongo que no estaba preparado para que fuera ese -- dijo despectivamente-- ¿y con la edad que hacemos? -- preguntó--

- la edad no importa -- dijiste--

- a vos... A mi sí, ¿que le viste por Dios? Ni siquiera es fachero como yo -- dijo haciéndote reír--

-no, nadie es mas fachero que vos-- dijiste y el sonrió--

- gracias por contarme, todavía seguís siendo mi nena, pero esto es la ley de la vida. Y solo voy a decirte que acá van a estar los brazos de papá para cuando te haga llorar -- dijo y lo abrazaste-- y más le vale que no lo haga porque no va a contar el cuento-- dijo y vos reiste--

- te amo-- dijiste--

-mmmm ya no se si creerte -- dijo y reiste-- invitalo a comer, decile que venga ahora -- dijo y te separaste--

-¿ya? ¿ de verdad? -- preguntaste--

- si, así lo conocemos todos -- dijo y sonreiste-- y también va a charlar con todos los hombres de la familia-- dijo y reiste-- dale...Llámalo amor, prometo que no te hago pasar vergüenza-- dijo y besaste su mejilla--

-Gracias papito-- dijiste sonriendo a más no poder--

- esa sonrisa me hace feliz a mí-- dijo y besó tu mejilla--





Agarraste tu celular y llamaste a Pedro para poder contarle.


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Capítulo 48

Sacaste la pequeña chocotorta de la heladera, y con dos tenedores, volviste a tu cuarto para verlo acostado y mirando televisión, vos reiste. Ni siquiera habías vuelto y ya estaba intentando evitarte.







-ya me apagas eso, porque me debes mil explicaciones -- dijiste y el suspiró--

-no me molestes -dijo sentandose en la cama, y agarrando el plato y un tenedor para el, vos rodeaste la cama y te sentaste a su lado nuevamente--

-Habla-- dijiste y el metió un bocado de la torta en su boca. Vos reiste-- Hey, mirá -- dijiste señalando la ventana -- que linda está la Luna -- dijiste a propósito y lo viste atragantarse, vos reiste-- ¡Sos un mono!-- dijiste y el mastico despacio-- ¿que pasó? -- preguntaste--

-nada estúpida, me atragante-- dijo-

- ¿por? No dije nada gracioso-- dijiste-- o para....¿Quien es Luna? -- preguntaste, rápidamente viste su espalda tensarse-- hijo de mil ya se que se llama así, decime quien es -- dijiste y el te miró, vos reiste--

-nadie -- dijo él--

-Me obligaste a hablar, ahora decime-- dijiste apuntándolo y comiendo un pedacito de la chocotorta--

- ¿quien te dijo? -- preguntó--

-un pajarito-- dijiste riendo--

- le voy a amputar el pajarito a tu novio, ¿sabes? -- dijo y estallaste en risas--

-ah, ¿o sea que Pedro sabía y no me dijo nada? -- dijiste indignada -- ah no, que traición-- dijiste riendo-- igual, no fue él -- dijiste mirándolo y comiendo otro pedazo de chocotorta--

-¿ y quién va a ser entonces? Es al único que le conté-- dijo enojado, con su ceño fruncido--

-Lunita tiene amigas también eh... No sos el único que le cuenta a sus amigos-- dijiste y el te miró--

-¿La conoces? -- preguntó asustado--

-gracias a Dios no, pero conocí a su amiga, y ella si me contó que estabas en algo con Lunita -- dijiste divertida--

-¡Para de gastarme por Dios! -- dijo tirándote una almohada-- ¿que amiga? -- preguntó y reiste. Te calmaste y te dispusiste a contarle la verdad--

-ese día que salí con las chicas y vos hiciste previa acá--dijiste -- el día que vino papá-- dijiste y el asintió-- bueno, estábamos invitadas a una previa con unos amigos del novio de Cami, la cosa es que supuestamente íbamos a estar juntas y ninguna se iba a cortar, en fin, pusimos un pie adentro de la casa y las dos desaparecieron con los novios, y yo me quedé absolutamente sola, en esa casa y con gente que ni conocía. Bueh, me senté y se me acercó una chica, que en mi puta vida la había visto y me preguntó como me llamaba que se yo, porque en algún lado me vio y no se que más-- dijiste y tu hermano te miraba con absoluta atención, vos metiste otro bocado de torta en tu boca y proseguiste-- y bueno, me preguntó si era tu hermana y yo quedé, ' Wow', le pregunté de donde te conocía y me dijo que su amiga estaba en algo con vos--, dijiste encogiendote de hombros--

- si, estaba acá-- dijo él y bajo la mirada--

-que te pones así estúpido-- dijiste riendo-- ¡Contame! -- dijiste--

-nada, la conocí en una fiesta un día y pegamos onda -- dijo encogiéndose de hombros-- igual no es nada importante-- dijo restándole importancia--

- pegamos onda y no es nada importante como que no son coherentes en una misma oración , ¿sabes? -- dijiste y lo viste suspirar-- ¿te gusta? -- preguntaste--

- es linda, que se yo...Pero es demasiado... No se cómo decirlo, babosa, pegajosa, todo el tiempo quiere que nos veamos, que hablemos, no se -- dijo exasperado vos reiste--

-¿y eso te molesta? -- preguntaste y el se encogió de hombros--

-no...pero nunca pase por esto--dijo y mordiste tu labio inferior--

- si le importas es obvio que va a querer verte, y vos también, si no querrías, no irías, y le cortarías el mambo de una, ¿no? Eso es lo que soles hacer -- dijiste y el te miró, sabías que lo hacía, siempre--

- es que no me quiero casar -- dijo y reiste--

-ay Gonzalo-- dijiste negando con tu cabeza-- te juro que el dia que te pase, vas a estar feliz todos los días. Muero por verte así, pero no haces nada por cambiar tu alma de pirata -- dijiste encogiendote de hombros-- al menos, si es buena mina que se yo, proba, capaz vale la pena-- dijiste --

- es que no quiero, le molesta que salga con los chicos, por eso la invité a la previa, encima sus amigas son igual de cargosas que ella -- dijo y vos reiste para luego golpearlo--

- ah, entonces decile flaco, nunca te dió asco parar el carro a nadie y de repente ¿ahora si? Dale...No me vengas con eso-- dijiste--

- es que, no es mala, estoy seguro que no es mala, pero me cela por boludeces, o se enoja por cualquier cosa, y esos caprichitos no me gustan -- dijo y mordiste tu labio inferior-- y apenas nos conocemos hace dos semanas -- dijo y reiste--

- decile que no y listo-- dijiste y el se encogió de hombros-- pero, ¿si siquiera tenés ganas de intentarlo? -- preguntaste y el negó. Vos lo miraste atentamente, luego sonreiste-- ¿te gusta alguien más? -- preguntaste--

-¿que? ¡no! ¡no! Nada que ver, ¡no! --dijo alterado--

-bueno cálmate...Solo pregunté-- dijiste riendo-- dale, ¿quien es? -- preguntaste--

- ¡que pesada que sos! -- dijo y reiste-- por favor, no digas nada, ni mucho menos te burles-- dijo y mordiste tu labio inferior--

-te lo juro-- dijiste--

-Camila-- dijo y tus ojos se abrieron--

-¿Mi Camila? -- preguntaste incrédula. El asintió-- ay te amo-- dijiste y el suspiró--

-bueno basta...Hablemos de otra cosa-- dijo y mordiste tu labio inferior, ya le sacarías información, pero suponías que había callado, porque Camila tenía novio--

-Okey-- dijiste sonriendo--

- che...Ahora que me acuerdo, ¡recien me cayó la ficha! Ese día que saliste al patio, Pedro quería asesinar a alguien-- dijo el y reiste--

-queria que me cambie el boludo-- dijiste y el rio--

-apa...dime más-- dijo el moviendo sus cejas--

- es un celoso de mierda -- dijiste riendo-- igual que todos ustedes ,lo odio-- dijiste y el rio--

- como lo voy a gastar dios-- dijo riendo--

-dejalo en paz-- dijiste y el señaló las notitas encima de la cama. Vos reiste--

-¿que es eso?-- dijo dejando el plato en la cama y agarrandolas-- ¡¿que es esta gilada por Dios?! -- dijo riendo y mirándote-- ¿no me digas que esto te mandaba Pedro? -- dijo estallando en risas y se las quitaste de las manos--

-¡dejalo! Si, es un dulce -- dijiste y el rio--

- ¡Noooo! Los chicos van a estallar cuando les cuente esto!-- dijo riendo--

- ¡Uy, Camila se va a morir cuando le cuente que te gusta !-- dijiste y el puso cara de terror-- imbécil, abrís la boca y yo también-- dijiste--

-perdon mocosa -- dijo y te abrazó para luego reir--





Ambos siguieron contándose historias, pero estabas contenta porque hubiera aceptado tu relación con Pedro de alguna manera.


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LEAN EL QUE SIGUE

Capitulo 47

Te sentaste en tu cama, y tomaste tu celular, tenías que parecer normal, bah, no normal, sino nerviosa.

Mientras pensabas en que hacer, la puerta se abrió, y Pedro hizo acto de presencia, automáticamente te levantaste de la cama.






-¿te golpeó? ¿estas bien? -- preguntaste intentando sonar preocupada, sabías que Gonzalo no le había hecho nada, pero... Supuestamente vos no habías escuchado nada, estabas en tu habitación--

-no, estoy perfecto y entero -- dijo sonriendo y acercándose a vos, el te abrazó por la cintura--

-¿se enojó mucho? -- preguntaste tocando su cara, el besó tus labios--

-un poquito...pero ya está, me tiene un poco amenazado pero fuera de eso está todo bien-- dijo y rodeaste su cuello con tus brazos--

-pense que te iba a pegar -- dijiste y el te abrazó apoyando su cabeza en tu hombro, sus cuerpos encajaban perfecto, tanto que amabas sus abrazos--

- ves que no-- dijo y se separó para mirarte, el sonrió y te besó, obvio que respondiste a su beso con todas las ganas que tenías acumuladas-- sos hermosa -- dijo y besaste su mejilla--

- te quiero-- dijiste, mirándolo a los ojos, sacandote las ganas de decírselo, así como habías imaginado hacerlo hace tanto tiempo, porque tu amor por él seguía intacto...Y sin querer queriendo, te enteraste que él también venía guardándolo hace tiempo. El sonrió y volvió a besarte--

- yo también Pochita, más de lo que te imaginas -- dijo y lo abrazaste, en ese momento la puerta de tu cuarto se abrió, quisiste soltarte pero Pedro no te dejó, sino que te apretó aún más contra el. Gonzalo estaba parado frente a ustedes--

-dijiste que la saludabas y te ibas -- dijo duramente, vos sonreiste--

- eso hacíamos-- dijiste todavía pegada a Pedro--

-ya me voy -- dijo besando tu cabeza-- que descanses-- dijo y dejo un beso en tus labios--

-no hagan eso frente a mí por Dios-- dijo Gonzalo haciéndolos reir--

- okey...Me voy -- dijo besando tus manos--

-cuidate, avísame cuando llegues -- dijiste y el asintió para luego salir de tu cuarto--






Ni bien cerró la puerta , soltaste un suspiro, Gonzalo no se había ido y ahora estaban solos.






-¿podemos hablar? -- dijo y le sonreiste--

- si gordo, ¿como en los viejos tiempos? -- dijiste acostándote en tu cama, invitándolo a que lo hiciera a tu lado. El sonrió y lo hizo, vos pusiste tu cabeza sobre su pecho-- ¿que pasa?-- preguntaste--

-eso quiero saber...¿que pasa?, ¿me vas a explicar? -- preguntó y levantaste la cabeza para sonreirle-- no me sonrias así, ¿mi mejor amigo Pau? -- preguntó y reiste--

- sí, ¿que tiene? -- preguntaste y el estiró tu cabello-- ¡ay! Estúpido -- dijiste y el besó tu frente--

-contame todo ahora, y no quiero mentiras-- dijo y suspiraste--

-no te voy a mentir, lo prometo-- dijiste y lo escuchaste suspirar-

- te escucho-- dijo--

- no se que estás esperando escuchar, pero... Toda mi vida lo quise, se ganó mi corazón-- dijiste y automáticamente lo sentiste tensarse-- desde chiquita, cuando el me defendía , me dejaba jugar con ustedes, me cuidaba, me compraba las cosas que quería en el colegio-- dijiste riendo ante esto último. Porque lo hacía-- antes no me daba cuenta obvio, capaz lo hacía porque le salía, pero cuando empezamos a crecer, que se yo, empecé a verlo con otros ojos, era lindo, pero era tu amigo. Era una pendeja de mierda, y era el primer chico que me gustaba, era como que cada vez que me miraba yo re flasheba historias de amor -- dijiste riendo-- el fue mi primer beso -- dijiste y otra vez lo sentiste tensarse--

- ah, es un hijo de puta -- dijo y vos reiste--

- pero fue el primero y el último que me dió, porque después desapareció y nunca supe bien porqué-- dijiste, medio a propósito también, necesitabas saber bien la historia que habías alcanzado a escuchar, pero como no dijo nada, decidiste seguir --  obvio que me quedé ilusionada, pensé que era una boludez de pendeja, pero cuando pasaba el tiempo me di cuenta de que lo quería digamos. Igual, nunca se lo dije...Hasta que volvió, me dije que no iba a volver a pasar lo mismo, porque lo sentía como mi debilidad. Pero, pasó y soy feliz, que se yo-- dijiste--

-¿de verdad lo querés?-- preguntó Gonzalo--

-¿Tan loco es? -- preguntaste riendo, el tambien rio--

- si, un poco, para mí lo es-- dijo--

-si, lo quiero. Es que no se si lo vas a ver de la misma forma, porque te va a costar creerlo, pero es tan atento conmigo, es tan todo, que volvió a ganarse mi corazón en menos de dos meses -- dijiste y el suspiró--

- no quiero que salgas lastimada-- dijo el, besando tu frente--


- créeme que yo también tengo miedo, tengo terror, pero, ¿Como voy a saber si hay posibilidades de que esté bien con él si no lo intento?, Le di una oportunidad de que me lo demuestre, y te juro que lo está haciendo, me lo demuestra todos los días-- dijiste-

-¿Que es lo que te tiene loca por el? -- preguntó divertido-- ni siquiera habla por Dios -- dijo y reiste--

- su forma de ser, y tiene mucho sentido del humor, ¿sabes? -- dijiste--

- estoy más que sorprendido, pero... Sabía que él sentía cosas por vos, nunca pensé que fuera en serio, dios, era un bebé de teta cuando me lo dijo y lo cagué a trompadas, pensé que le saqué el capricho con las piñas que le di, pero...Me lo decís tal cual me lo dijo él, que... Siento que es en serio-- dijo y sonreiste--

- es que es en serio-- dijiste y el te abrazó-- hasta mamá lo sabía -- dijiste riendo--

-¿como que mamá sabía? Que traidora -- dijo y ambos rieron--

- Pedro siempre me compraba chupetines, y se los daba a mamá para que me los diera -- dijiste --

-ah, era sabio el pibe, sabe que con comida te compra cualquiera -- dijo y golpeaste su estómago para luego reir--

- estúpido-- dijiste y volvió a besar tu frente--

- solo te pido que me jures por mamá, que si te llega a lastimar, voy a ser el primero en enterarme. Porque no me va a importar nada y lo voy a matar, puede que sea mi mejor amigo, pero sos mi hermanita, y contra eso, no hay con que darle -- dijo y lo abrazaste, fuerte--

-vas a ser el primero en saberlo-- dijiste  y el te abrazó--

- te amo pendeja-- dijo y sonreiste--

- yo a vos... Y feliz cumpleaños-- dijiste y el se separó para sonreír--

-hey, es verdad. Es mi cumpleaños, me dieron un regalo tan lindo que me olvidé-- dijo irónico y volviste a abrazarlo-- ¿Que me vas a regalar? -- preguntó--


- Voy a contratar a alguien para que entre a tu jungla  y la limpie -- dijiste haciendo referencia a su cuarto, el comenzó a reír y estiró tu cabello--

-que maldita...Pero, tenés razón, hacelo -- dijo y ambos rieron--

-tan buena hermana soy que hice una chocotorta chiquita para que la comas vos solo-- dijiste y sonrió---

-la quiero ya-- dijo y reiste--

- la traigo y seguimos charlando...Mira que me enteré de algo eh-- dijiste y el te miró con los ojos abiertos--




Vos reiste y te levantaste para salir de tu cuarto.



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Capítulo 46

Seguían parados frente a tu hermano, y tomados de la mano fuertemente.






-¿Pedro? -- preguntó el, mirándolos fijamente, a ustedes no, sino a sus manos unidas--

-¿Podemos sentarnos? -- preguntaste y el asintió para luego darse la vuelta y caminar hacia el living--

-¿me pueden explicar que mierda está pasando? -- dijo una vez en el living, pero no se sentó, sino que quedó parado a un lado del sillón, con sus manos en su cintura--

-si...Yo te lo voy a explicar-- dijo Pedro, suspirando y soltando tu mano suavemente--

-solo te pido...que no grites-- dijiste  y te quedaste parada junto a Pepe, quien estaba más nervioso que nunca--

-Gonzalo... me hubiese gustado hacer esto solo, porque es algo que tenemos que hablar vos y yo también, pero las cosas se están dando así, y bueno-- dijo él y miraste a tu hermano, quien pasaba sus ojos de uno al otro--

-¿Paula? -- te preguntó a vos, vos miraste a Pedro y el negó con la cabeza, serías vos quién lo dijera --

- Pedro y yo estamos en algo-- dijiste y te acercaste más a él para tomar su mano--

-¡¿que?! -- dijo mirándolos como si ambos tuvieran tres cabezas. Luego comenzó a reír-- dejen de joder, casi me da un ataque...No es bueno que aparezca muerto en el día de mi cumpleaños-- dijo riendo, Pedro te miró y el suspiró--

-es verdad Gonzalo, estamos en algo hace un par de semanas -- dijiste y automáticamente su sonrisa se borró, lo viste apretar sus puños y--

- ¡Diganme que es una joda! ¡Decime que es una joda!-- dijo apuntando a Pedro--

-no lo es Gonzalo-- dijo y viste a tu hermano pasarse las manos por su cara--

-¡Vos más que nadie sabes cómo son las cosas! ¡Dije hasta el cansancio que con mi hermanita no! ¡¡ No vas a jugar con ella!!-- dijo acercándose bruscamente, y lo hizo tan rápido que ni siquiera pudiste reaccionar cuando lo agarró de la camisa--

-¡No voy a jugar con ella! La quiero-- pudiste escuchar que le dijo algo agitado, ahora mismo lo arrinconó contra la pared--

-Gonza...¡Gordo para por favor!-- dijiste tomando su brazo, intentando que lo soltara--

-andate Paula...Esto no es con vos-- dijo enojado, y sentías unas ganas terribles de llorar--

-gordo para, por favor -- dijiste con tus ojos húmedos--

-¡Andate carajo!-- dijo enfurecido--

-anda Pau, por favor -- pidió Pedro y negaste con la cabeza-- por favor, anda, solo vamos a hablar-- dijo el, mirando a Gonzalo, quien le dió un golpe terrible a la pared--

-¡Anda gorda! Por Dios andate...-- dijo Gonzalo agarrándose los pelos. Miraste una vez más a Pedro, quien asintió.






Vos suspiraste y te diste la vuelta para dirigirte a las escaleras, y antes de hacerlo, te escondiste en la cocina, debajo del desayunador, te recostaste contra la pared y abrazaste tus rodillas, pidiéndole a Dios que tú hermano no golpeara a Pedro.








- no te imaginas las ganas que tengo de partirte la cara ahora mismo-- dijo con toda la bronca del mundo--

-solo te pido que me dejes explicarte, después podes hacer lo que quieras -- dijo Pedro. Lo próximo que escuchaste fueron pasos y luego se sentaron en el living--

-Habla...Y dame una buena razón para no matarte-- le dijo--

- la quiero -- dijo y tu corazón latió con fuerza en tu interior-- tiene que ser motivo suficiente. Sabes muy bien que jamás la lastimaría, nunca lo hice, siempre la cuidé como si fuera hermana, pero ahí estaba el tema porque nunca la vi de esa forma...Y eso es algo que también sabés-- dijo Pedro, y estabas a punto de escupir un pulmón--


-Vos y yo sabemos que era un capricho de cuando eras pendejo, en esa oportunidad te dije que no te volvieras a acercar a ella-- dijo Gonzalo y frunciste el ceño--

- y lo hice...Lo hice por vos, pero nunca lo hice por mi, porque jamás fue un capricho mío-- dijo él, con esa calma que lo caracterizaba--

- ¡Paula tenía trece años por Dios! Estabas a punto de ir a la facultad, ¿que mierda se te cruzaba por la cabeza? ¿creias que iba a dejarte que la ilusionaras? ¿para que después te fueras y la dejaras llorando por vos? -- preguntó y todos tus sentidos se pusieron alerta--

- yo la quería de todas formas, y si tan solo me hubieras dado la posibilidad de intentarlo, me hubiera quedado, por ella-- dijo y tu corazón dejó de latir, no entendías nada. Absolutamente nada--

- no me importa lo que hubieras hecho Pedro, pero de ninguna manera voy a dejar que la lastimes-- dijo Gonzalo--

-No la voy a lastimar... quiero hacerla feliz-- dijo y mordiste tu labio inferior para luego sonreír--

-te juro que si no estuvieramos hablando de mi hermana, me cagaría de risa en tu cara por las estupideces que estás diciendo...Pero las ganas de querer golpearte me superan-- dijo tu hermano--

-Si tenés ganas, hacelo, pero no voy a dejar de quererla, ni tampoco voy a hacer lo que me digas. Está vez no-- dijo él--

- ¡es una nena! ¡solo quiero que veas eso!-- dijo --

-es así como la ves vos, Paula ya es toda una mujer, y creo que puede decidir lo que quiere hacer -- dijo Pedro--

- eso no te lo discuto...pero no deja de ser mi hermanita-- dijo Gonzalo, y podrías abrazarlo toda una vida--

- necesitas hablar con ella también, quiero que sea ella quien te saque las dudas que tenés sobre mi. Porque de verdad que la quiero, y Dios sabe que la quise toda mi vida -- dijo y estabas pasando por todas las emociones del mundo--

-Solo...Déjame procesarlo, no quiero imaginarlos juntos-- dijo y sonreiste-- no la puedo imaginar con nadie-- dijo-

- te dejo procesarlo todo lo que quieras...Pero no voy a cambiar de opinión, quiero a Paula, y voy a hacer todo por verla feliz. Y también me voy a encargar de que sepa todo lo que hice por ella, y que por tantos años te llevaste todo el crédito-- dijo el, y por primera vez escuchaste reír a tu hermano--

-¡No! Déjame seguir siendo su héroe-- dijo y ambos rieron--

-de verdad la quiero Gonzalo, no la voy a lastimar. Dame un voto de confianza para demostrartelo, ella ya me lo dió-- dijo y sonreiste--

- te juro por mi vida  que si la veo derramar una lágrima por vos, mejor amigo o no, no voy a dudar ni un solo segundo en arrancarte las bolas, y dárselos a Bady para que las coma -- dijo y reiste--

- no va a ser necesario... Te lo prometo, la voy a cuidar mucho -- dijo Pedro, haciéndote morir de amor--

- eso espero...-- dijo-- así que ahora me merezco un regalo si vas a ser mi cuñado -- dijo y ambos rieron--

- sos el único que no regala nada, no todos somos como vos-- dijo y escuchaste las palmadas en la espalda, típica del abrazo de hombres. Y sentiste que el alma te volvió al cuerpo--¿Puedo saludarla antes de que se vaya a dormir? -- preguntó--

- no te pases Alfonso--dijo Gonzalo. Y rápidamente te dirigiste a las escaleras para dirigirte a tu habitación-




Una vez que entraste, cerraste la puerta detrás tuyo para largar un suspiro. Lo peor ya había pasado.




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Capítulo 45

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En toda la cena, no pudiste evitar apartar tus ojos de Pedro, bueno, lo más disimuladamente posible, porque tenías a todo el ejército de hombres a tu alrededor.

Pedro hablaba distendidamente con tu padre y con tu hermano, de temas que no llegabas a entender, pero no te importaba, porque su mano acariciaba la tuya por debajo de la mesa. Tenías unas ganas terribles de agarrar su cara y besarlo allí, delante de todos, pero sabías que eso se acabaría en poco tiempo, bah, en casi nada, porque pensabas hablar con Gonzalo en la próxima oportunidad que se te presentara.



La cena llegó a su fin, y todos ayudaron a Helena a juntar la mesa, luego de a poquito iban subiendo a sus habitaciones, menos Gonzalo, Pedro y vos, quiénes se quedaron abajo, comiendo unos bombones que tú papa había comprado.







-¿te vienen a saludar? -- preguntaste--

-no, dije que no. Mañana porque quiero dormir, estoy muerto -- dijo Gonzalo y sonreiste--

- flojito de mierda-- dijiste y el te tiró una servilleta-- yo me voy a dormir entonces-- dijiste y Pedro te miró, vos le tiraste un pequeño beso y saludaste  a ambos para luego dirigirte a tu habitación.






Una vez en la soledad de tu cuarto, respiraste con normalidad y caminaste hasta tu escritorio, necesitabas todas las pruebas, necesitabas leer todas esas notitas una vez más.

Abriste tu cajón y sacaste algunas. Sonreiste al leerlas, ¿de donde había sacado frases tan lindas?, estabas que morías de amor, como siempre, solo que ahora estabas un poquito más muerta de lo normal.

Tu celular vibró y sonreiste porque sabías que se trataba de el.




'¿Puedo subir a darte un besito? Gonzalo se fue a bañar , le dije que lo esperaba para saludarlo y me iba'

' subí, dale❤'

'voy 😍'





Sonreiste y tomaste las notitas para dejarlas sobre tu cama. La puerta se abrió a los pocos segundos y Pedro apareció.






-Hola -- dijo el, sonriendote--

-hola -- dijiste acercándote y abrazándolo. El besó tu mejilla y luego se separó para mirarte--

-¿estabas por irte a dormir sin darme un beso?-- preguntó indignado ---


- sabía que ibas a subir-- dijiste rodeando su cuello con tus brazos. Él sonrió y te besó--

-¿que estabas haciendo? -- preguntó acariciando tu cintura--

-estaba buscando las notitas de las que te había contado hace un tiempo, hoy apareció otra y se las estoy por dar a mi papá para que las lleve a la policía-- dijiste abrazándolo y escondiendo tu cara en su cuello, no ibas a poder aguantar la risa--

-¿Como que a la policía? -- preguntó--

-si, es que no se cómo llegan a mi cuarto y me da miedo-- dijiste y te separaste para mirarlo, el suspiró. Vos estallaste en risas--

-¿que pasó?-- dijo y besaste su mejilla--

-¿estabas esperando a que te lleven preso para decirme que eras vos?-- preguntaste y el suspiró para luego sonreír-- hey-- dijiste y lo viste desviar la mirada--

-perdon, no quise asustarte-- dijo el y mordiste tu labio inferior--

-creeme que lo hiciste, hasta hoy, que vi tu blog de notas sobre la mesa -- dijiste sonriendole y besando su mejilla--

-¿te gustó al menos? -- preguntó y reiste--

-¿de donde sacaste esas frases hermosas? Y quiero que me digas porqué me escribías todo eso-- dijiste y el besó tus labios--

-es de una canción...pero porque todo lo que escribí es lo que me pasa -- dijo y lo soltaste para tomar su mano y sentarlo en tu cama junto a todas las notitas. Tomaste una y se la mostraste,  "This love is never growing old ,You make it new".  El sonrió, y vos te sentaste a su lado.


-¿y esta? ¿que significa? -- preguntaste--

-yo... Pau-- dijo haciendo una pausa-- hice esto, porque.... Porque no sabía cómo decirtelo en persona, porque me cuesta mucho-- dijo rascando su nuca-- créeme que no espero a que creas lo que te digo, pero es la verdad-- dijo suspirando--  y esa es una de las frases que me identifica, porque el amor que siento por vos nunca se hizo viejo, cuando volvimos a vernos, lo hiciste nuevo-- dijo y sentiste un nudo en la garganta, que próximamente se convertirían en lágrimas si no le pedías que se detuviera--

-para...Por favor para, Gonzalo está afuera y me vas a hacer llorar -- dijiste y el sonrió, vos te levantaste y te sentaste sobre su regazo-- ¿que pasa si te digo que me pasaba lo mismo?-- preguntaste y el sonrió--

-voy a morirme acá-- dijo y reiste para besar su mejilla-- de verdad te quiero...Y mucho-- dijo haciéndote contener la respiración--

- ¡dios! yo tambien te quiero... Pero necesito una explicación de todas estas notas, igual después ya me las vas a dar. Ahora...Necesito que vayamos a decírselo a Gonza, porque ya no me quiero esconder-- dijiste y el abrió sus ojos con sorpresa--

-¿como? -- preguntó y besaste su mejilla--

-que quiero que Gonzalo lo sepa, me decidí está tarde, y lo iba a hacer. Pero te encontré acá, y descubrí esto...Que solo hizo que me dieran más ganas de que lo sepa -- dijiste y el te sonrió--

-¿estas segura? Te juro que puedo esperar-- dijo y sonreiste--

-estoy segura-- dijiste y el te besó con ganas--

- yo se lo voy a decir-- dijo y negaste--

-los dos-- dijiste y entrelazaste los dedos de tus manos con los suyos-- se va a enojar... Mucho -- dijiste juntando su frente con la tuya--

-y estoy dispuesto a recibir todos los golpes del mundo, porque quiero estar con vos-- dijo y tu corazón dió un salto en tu interior--



Con tu mano libre, lo acercaste a tu boca por la nuca y lo besaste. Necesitabas hacerle saber que estabas lista para hacerlo, para dar ese paso por él, por los dos. Para hacerle saber que creías en él, que apostabas por ustedes.

Los dos se levantaron despacito y salieron de la habitación tomados de la mano, suavemente bajaron las escaleras y vieron a Gonzalo sentado en el comedor, automáticamente se dio la vuelta.







-Hey Pepe.... Pensé que ya te habías ido-- dijo el, sonriendo. Pedro apretó tu mano-- ¿Pau? ¿no te ibas a dormir? -- preguntó y su mirada se desvió hacia sus manos, las cuales estaban entrelazadas--

-Gon-- dijiste y lo viste mirar a Pedro--

-Gonza, tenemos que hablar-- dijo Pedro--





Sentías a tu corazón a punto de salirse de tu pecho, Gonzalo estaba mirándolos a los dos fijamente, y en minutos iba a saber la verdad.

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Capítulo 44

Los días iban pasando muy rápido, tanto que ni te habías dado cuenta de que pasó exactamente dos semanas.


Estabas contenta, feliz, no podías poner en palabras todo lo que estaba pasándote, porque te costaba creerlo, porque te costaba admitir que estabas cada día más enamorada de Pedro, él era todo  en lo que podías pensar.


Ahora mismo estabas entrando al estudio, para llevar a cabo la última clase de la semana, Guillermina estaba sentada mirando su celular.







-buenas -- dijiste mientras dejabas tu bolso a su lado--

-hola pelotucha-- dijo ella levantando la cabeza y le sonreiste--

-¿como estás? -- preguntaste sentándote a su lado--


-bien bien, ¿vos? Nah, no me digas, tu cara de imbécil me lo dice todo -- dijo riendo y reiste también-- ¿como anda el dueño de tu cara de pelotuda? -- preguntó y reiste--

-Ahi anda, ¿Y Maurito? -- preguntaste--

-cortamos ayer, pero volvimos hoy al mediodía-- dijo y rodaste tus ojos para luego reír-- ¿ya blanquearon? -- preguntó--

-el quiere hacerlo, yo también quiero, pero es como que me da miedito, Gonzalo lo va a matar cuando se entere -- dijiste y ella sonrió--

-no tiene porqué meterse te cuento...Pero si, obviamente hay esas reglas entre amigos -- dijo ella y asentiste--

- pero muero por hacerlo y dejar de esconderme -- dijiste y ella te sonrió--

-hacelo, se lo merece, ¿no te parece? -- preguntó y sonreiste--

-si, me viene aguantando hace mucho, pero encima mañana es el cumpleaños de Gonzalo-- dijiste y ella sonrió--

- hermoso regalo de cumpleaños-- dijo riendo y reiste también--

-callate -- dijiste riendo y se puso de pie para dar comienzo a la clase--







Ella comenzó a marcarte lo que tenías que hacer. Lo hiciste como si nada, estabas relajada y contenta, tanto que ni siquiera sentiste las dos horas,casi tres que estuviste bailando, el tiempo había pasado volando y ahora mismo estabas volviendo a casa.


Una vez que llegaste, viste a tu papá jugando con Beltrán, tu corazón se apretó de ternura, porque amabas verlos juntos.








-Hola bombones -- dijiste entrando y los dos levantaron la vista para mirarte--

-¡Hola Pau! -- dijo el más pequeño--

-hola mi vida -- dijo tu papá y seguiste tu camino hacia tu cuarto, pero tu corazón se detuvo al ver a Pedro sentado en la mesa del comedor y con tu hermano--

-buenas-- dijiste y pudiste ver sus ojitos felices cuando te vio, estabas segura de que pusiste la misma cara que él--

-hola Pau-- saludo el--

-hola mocosa -- dijo Gonzalo--

-hola imbéciles, ¿laburando a estas horas? -- dijiste y ellos asintieron--

-tenemos que adelantar trabajo si queremos festejar mañana -- dijo Gonzalo feliz y mordiste tu labio inferior--

- okey-- dijiste y le guiñaste un ojo a Pedro sin que tu hermano te viera-- me voy a bañar-- dijiste--

-baja rápido que ya está la cena -- dijo tu padre y asentiste para luego subir-






Rápidamente te metiste en tu cuarto y te dispusiste a bañarte. Tenías mucha hambre y sabías que si ellos también la tenían no iban a esperarte, reiste ante tu pensamiento, pero así era.

Cuando terminaste, saliste y te peinarte para luego poder cambiarte, sonreiste al pensar en que ibas a ponerte. Finalmente te decidiste por el pijama, un vestido de color azul que tenía un unicornio en el centro, lo amabas, pero no era algo que solías usar cuando había gente, porque era un poquito demasiado corto, pero.... estaba Pedro.


 Reiste y te acercaste a tu escritorio para perfumarte, cuando algo llamó tu atención...una notita estaba encima de tu computadora.



"Still falling for you".




Frunciste el ceño, te habías olvidado por completo de estas notas que aparecían casi periódicamente en tu cuarto por arte de magia, tanto, que también se te olvidó el miedo que te causaba. Dejaste la nota en el lugar y saliste de tu cuarto pensando en eso, y en quien podría ser la persona que dejara eso allí.

Una vez abajo, te encontraste con tu hermano y Pedro aún en la mesa, y Helena a su lado pidiéndoles que ordenaran la mesa para cenar. Sonreiste y te acercaste.






-Volvi-- dijiste y automáticamente sentiste la mirada de Pedro, por supuesto que te miraba de arriba abajo--

-mocosa muerta de hambre-- dijo Gonzalo terminando de escribir algo en la computadora y cerrandola--

-vos. Imbécil-- dijiste--

-¿que me vas a regalar? -- preguntó--

-una patada en el orto porque me rompiste mi llavero-- dijiste haciendo reír a Pedro--

-era un peluche, imposible no arrancarlo -- dijo y miraste a tu papá--

-papi, me rompió mi chanchito-- dijiste--

-lo voy a hacer comprarte otro mi vida -- dijo y reiste--

-¡Junten todo que vamos a comer!-- dijo Helena una vez más y los dos comenzaron a guardar todo.--





Veías a Pedro ordenar todos sus papeles muy concentrado, estaba muy lindo de esa forma, bah, de todas las formas posibles.






-¡anota el número de la cuenta porque te vas a olvidar!-- le dijo Gonzalo y el sonrió para luego sacar un block de notas y hacerlo. Tus ojos se abrieron con sorpresa...conocias esas dichosas hojitas de colores, mordiste tu labio inferior....Habías encontrado al culpable--





Rápidamente guardó todas sus cosas y Helena finalmente pudo poner la mesa para que todos se sentaran a cenar, y luego procedió a servir la comida.

Por esas casualidades que aparecen en la vida, Pedro se sentó a tu lado y sonreiste al sentirlo tomar tu mano, habías extrañado el contacto de su piel en todo el día, porque apenas habían cruzado un par de palabras por teléfono.

La cena comenzó y todos empezaron a charlar entre todos, Gonzalo que no paraba de pedir regalos y diciendo que la casa sería un auténtico desastre en la noche. Vos, con tu cabeza puesta en que iba a decir  Pedro cuando le dijeras que lo habías descubierto....necesitabas que te lo dijera, para que pudieras morir de amor una vez más.



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LEAN EL QUE SIGUE.

Capítulo 43

Estaban por ser las 6:00 am de la mañana, y ambos seguían abrazados en el sillón, 'mirando' una película que el habia puesto y que no sabías de que se trataba porque no la miraste ni por dos minutos seguidos.


Estabas muy concentrada en hacerle 'mimitos' en el pelo, cosa que a él parecía relajarlo mucho, demasiado para tu gusto.


 Tenía sus ojos cerrados, cosa que facilitaba tu labor de mirarlo de cerca, de estudiar cada rasgo de su cara.







-¿estas dormido? -- preguntaste en un susurro, el sonrió--

-no...estoy disfrutando de tus mimos-- dijo y te acercaste para besar su mejilla--

-¿te gustan mis mimos? -- preguntaste--

-muchisimo -- dijo abriendo sus ojos, haciendo que tu corazón diera un saltito en tu interior-- pero vos me gustas mucho más -- dijo haciéndote sonreír y sonrojarte también--

-no quiero cortar el clima, pero me parece que tengo que volver a casa -- dijiste y el hizo un puchero--

- no lo cortes entonces, estamos bien así -- dijo sonriendo, vos te acercaste y besaste sus labios-- ¿sabes algo?-- preguntó--

-¿que? -- preguntaste--

- me gusta mucho estar con vos,  es algo nuevo para mi, pero algo muy lindo -- dijo y sonreiste a más no poder--

- a mi también me gusta... Aunque déjame decirte que no lo creia posible-- dijiste divertida--

-¿no me tenías fe? -- preguntó y reiste--

-mmm no mucha que digamos -- dijiste arrugando tu nariz--

- espero estar borrando todas tus dudas -- dijo el y sonreiste--

- de a poquito las estás borrando a todas -- dijo y el sonrió, amabas verlo sonreír, y más si eras vos quién la provocabas--






Él tomó tu rostro con sus dos manos y se acercó para poder besarte, en el sentido completo de la palabra, porque apenas podías respirar. Ambos se perdieron en el besó, en las caricias de sus lenguas que jugaban entre ellas.






-¿de verdad te querés ir? -- preguntó, mientras acariciaba suavemente tu rodilla--

-obvio que no, pero papá dijo que hoy era día familiar, y no quiero imaginar lo que debe tener preparado. De seguro ya está despierto -- dijiste riendo y el sonrió para besar tu mejilla-

- que malo don Chaves -- dijo y sonreiste--

-si,  porque todos salimos, hasta Beltrán dijo que tenía planes con Bady -- dijiste riendo--

- ¿no dijo nada Beltrán del otro día?-- preguntó y con tu mano tiraste su cabello hacia atrás--

-no... Lo hice prometer que no iba a decir nada-- dijiste y besaste su frente--

- que bien -- dijo-- ¿vamos? -- preguntó y asentiste para besarlo una vez más y levantarte de encima--







Camino por todo el departamento con vos tomada de la mano, mientras apagaban las luces al pasar.







-No quiero que termine el fin de semana-- dijo mientras esperaban el ascensor, vos reiste--

-¿horas extra señor? -- preguntaste, el río y negó con la cabeza--

-no exactamente, pero no es que disfrute mucho de levantarme temprano-- dijo y reiste, en ese momento las puertas del ascensor se abrierony ustedes enteraron. Rápidamente el te abrazó y apoyo su barbilla en tu cabeza, mientras vos disfrutabas de los latidos de su corazón--






La noche estaba llegando a su fin, y no querías que acabara, no querías separarte de sus brazos, esos en los que tan protegida te sentías.






-si hay alguna posibilidad de que podamos vernos más tarde, no dudes en avisarme-- dijo y reiste para luego levantar la cabeza--

-te prometo que lo hago-- dijiste y el besó tu frente--






Llegaron al estaciónamiento y emprendieron camino hacia tu casa, nuevamente volvió a tomar tu mano.

Notabas que iba despacio y eso solo hacia que te derritieras por él.

No quedaba mucho para llegar, pero estaba dando muchas vueltas. Sonreiste y le diste la espalda a la ventanilla para poder mirarlo, el giró su cabeza y te sonrió, tomó tu mano y la besó.






-no vamos a llegar nunca si seguís dando vueltas eh-- dijiste divertida, el sonrió--

-¿tan obvio soy? -- preguntó--

- un poquito-- dijiste tomando su mano entre las tuyas--

-no quiero que te vayas, quiero quedarme un ratito más con vos-- dijo y mordiste tu labio inferior--

-sos un bombón--dijiste sonriendole--





A los pocos minutos llegaron, Pedro estacionó unos pocos metros más adelante de tu casa, apagó el motor del auto y adoptó la misma posición que vos, de espaldas a la ventanilla y mirándote, vos le sonreiste.






-¿la pasaste bien? -- preguntó y sonreiste--

-obvio que si, ¿tenes alguna duda? -- preguntaste y el se acercó para besarte, obviamente aceptaste su beso y pusiste tus manos en su cara. Él sonrió y se separó lo suficiente para pegar su nariz a la tuya--

- ¿me prometes que vas a soñar conmigo? -- preguntó y sonreiste--

-ultimamente sos el protagonista de todos mis sueños-- dijiste haciéndolo sonreir--

-que bueno saber que no soy el único que te piensa día y noche -- dijiste y te acercaste para besarlo, y está vez para despedirlo también. Unos cuantos besos después, tuviste que separarte de él--

-me tengo que ir bombón-- dijiste y el asintió-

-tene cuidado, y avísame cuando  estés en tu cuarto-- dijo y sonreiste para besarlo una vez más--






Bajaste del auto y luego de tirarle un beso, caminaste hasta tu casa. Suavemente abriste la puerta intentando no hacer mucho ruido, al parecer todos dormían, bueno...O eso pensabas, porque cuando pasaste por la cocina, pudiste ver a tu papá preparándose un café.







- hola papito, buen día -- dijiste, el se dio la vuelta y te sonrió--

-hola mi amor...¿como te fue? -- preguntó y te acercaste a saludarlo--

-bien, bien  gracias, ¿como dormiste? -- preguntaste--

-perfecto...¿quien te trajo? -- preguntó-

-volvi con Cami-- dijiste y el asintió-- ¿a que hora nos vamos pa? ¿me dejas dormir un ratito? -- preguntaste y el sonrió--

-pense que te olvidaste...Dormí tranquila mi vida, para el mediodia los despierto. Vamos a ver a los abuelos -- dijo y sonreiste--

-dale, nos vemos después--dijiste y subiste las escaleras.





Una vez que llegaste a tu cuarto, viste un mensaje de Pedro que te preguntaba si habías llegado. Sonreiste y le contestaste rápidamente, y no veías la hora de poder verlo otra vez.


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Capítulo 42

Finalmente Pedro arrancó el auto, y lo hizo sin soltar tu mano. Tenía sus dedos entrelazados con los tuyos, te gustaba que lo hiciera, tu gustaba tomar su mano.







-siendo las 3 de la madrugada a ella se le ocurre tomar helado...Si ves algo abierto avísame eh-- dijo divertido --

-hey, bueno...Capaz hay algo abierto -- dijiste golpeando su brazo--

- busquemos un kiosco 24 horas, capaz tienen los helados de palito -- dijo él y sonreiste-- ¿queres eso igual? -- preguntó --

-si, dale -- dijiste--

-¿ a donde querés ir después?  ¿vamos a dar vueltas por ahí? -- preguntó--

-si, como quieras Pepe-- dijiste y el sonrió para volver a besar tu mano--







Siguieron dando vueltas hasta que vieron un kiosco abierto, y el decidió detenerse.

Las calles estaban desiertas, tanto que hasta daban miedo, pero estabas con él.

Pedro se bajó del auto y te abrió la puerta para que bajarás, tomó tu mano y entraron al kiosco, rápidamente se dirigieron a la  heladera exhibidora.








-¿cual querés? -- preguntó el--

-mmm me gustan todos, que difícil -- dijiste riendo, y el sonrió--

-¿me dejas elegirte uno? -- preguntó--

-adelante...Me harías un favor-- dijiste , el besó tu mano la cual todavía tenía entrelazada a la tuya--







Pedro eligió uno por vos, y uno para el, los pago y volvieron a salir, aún tomados de la mano, ninguno de los dos hacia nada por soltarse, y tampoco querías, te gustaba sentir su contacto.







-¿queres que nos sentemos? ¿o preferís el auto? -- preguntó--

-no, por acá está bien -- dijiste y te guío hacia el cordón de la calle, sonreiste y el se sentó primero. Vos te sentaste con cuidado, no debías olvidar que eras una señorita y que tenías una pollera. Así que con todo el cuidado del mundo, te acomodaste para que nada se viera.

Pedro estiro una de sus piernas, e hizo que pusieras las tuyas encima.







- no se va a ver nada...No lo voy a permitir-- dijo el, quien se acercó a besar tu mejilla-

-gracias -- dijo, cuando tomó tu helado y lo abrió para vos-- ¿seguian en casa cuando te hablé?-- preguntaste mientras mordias un pedacito del helado--

-si, estaban todavía-- dijo él, mordiendo el suyo y volviendo a tomar tu mano. Tu lengua picaba por preguntarle si había chicas presentes, pero preferiste no hacerlo, no tenías porqué-- igual, cuando me avisaste, estaba a punto de irme a casa -- dijo y te acercaste un poco más para poner tu cabeza sobre su hombros--


-¿porque? -- preguntaste-

-no tenía ganas -- dijo el, y soltó tu mano, para pasar su brazo por detrás de tu espalda y acercarte más a él-- ahora estoy mucho mejor-- dijo y sonreiste, levantaste un poco tu cabeza para besar su mejilla--

-yo también estoy mucho mejor-- dijiste,  mordiendo tu helado de a poquito, el cual iba terminándose--

-que romántico soy ¿no? Que te traigo al cordón de la calle-- dijo riendo, vos sonreiste y levantaste la cabeza para verlo, el te miraba también--

- no me molesta, me gusta mucho-- dijiste y el se acercó para besarte, podías sentir el frío de su boca,  y el sabor del limón de su helado, mezclado con el de frutilla que era el tuyo. Ambos estaban muy a gusto con su beso, que solo tuvieron que separarse porque sentiste una gota del helado caer sobre tu pierna, pegaste un salto al sentir el frío-- que boluda -- dijiste riendo y limpiando la gotita con tu dedo, el agarró tu mano y chupó tu dedo-- cochino-- dijiste arrugando tu nariz, el besó tu mejilla--

-¿y ahora? ¿que hacemos? ¿queres ir a caminar? ¿o vamos a casa? ¿o querés que te lleve a la tuya? -- preguntó y te encogiste de hombros, te daba igual a donde fueran, solo querías estar con él--

-vamos a tu casa... Si no tenés problema de llevarme a la mía después-- dijiste y el sonrió--

-yo te llevo-- dijo besándote una vez más--







Una vez que terminaste tu helado, volvieron a subir al auto y emprendieron camino hacia su departamento, está vez, el tenia su mano sobre tu pierna izquierda, movía su dedo pulgar en forma de caricia, la quitaba de su lugar solo cuando tenía que manejar los cambios.



Cuando llegaron, estaciono el auto y te ayudó a bajar, luego abrió la puerta para vos y te dejo entrar al edificio para luego dirigirse al ascensor. La brisa del aire acondicionado te hizo poner la piel de gallina.






-hey, ¿tenes frío?-- preguntó mientras subían al ascensor--

-me dio frío el aire -- dijiste y el te acercó a su cuerpo para rodearte con sus brazos--

-¿mejor? -- preguntó y sonreiste contra su pecho--

-mucho -- dijiste y levantaste la cabeza para sonreírle, luego te acercaste a besar sus labios, el sonrió entre besos--







Cuando llegaron, sin dejar de abrazarte, abrió la puerta y ambos entraron juntos. El te rodeo la cintura con sus brazos y besó tus labios, primero suavamente  y a medida que pasaban los segundos, ese beso se fue haciendo cada vez más intenso y apasionado. Vos rodeaste su cuello con tus brazos y lo ayudaste hacerlo un poco más intenso, te gustaba su manera de besar, te gustaban sus besos, te gustaba todo de él.


 La respiración comenzó a faltarles y ambos tuvieron que separarse en contra de su voluntad. Reiste al ver su boca, era un desastre, lo habías ensuciado con tu lapiz labial otra vez.







-¿que pasa? -- preguntó divertido--

-te pinté todo otra vez-- dijiste pasando tu dedo pulgar por sus labios. El lo besó--

-no me limpies...Igual me vas a ensuciar de nuevo porque no pienso dejar de besarte -- dijo y vos sonreiste, Pedro tomó tu mano y se sentó en el sillón, luego hizo que te sentaras sobre sus piernas-- esto está mejor que el cordón de la calle ¿no? -- dijo y reiste para luego besar su mejilla-- me encanta hacerte reír -- dijo mirándote con una pequeña sonrisa, vos lo besaste--

- a mi me encanta que lo hagas-- dijiste rodeando su cuello con uno de tus brazos.




El entrelazó su mano con la tuya que estaba libre, vos te acercaste a su boca una vez más, y lo besaste con todas las ganas que tenías, en ese beso le agradecias todas las cosas lindas que te decía y que por vergüenza o inseguridad, no te atrevias a responder. Estabas segura que solo era una cuestión de poco tiempo para que te acostumbrarás a escucharlo decirte todo eso y para que pudieras contestarle de la misma forma...y no faltaba mucho.






- estás muy linda-- dijo el, soltando tu mano y con la suya acomodó tu cabello detrás de tu oreja. Vos sonreiste--

- vos también estás muy lindo, te sienta muy bien ese color-- dijiste acariciando el vello de su pecho que se asomaba por la camisa, cuyos primeros botones estaban desprendidos.-- espero que en casa no hayan habido chicas eh -- dijiste y el besó tu mejilla--

-dijeron que iban a ir unas amigas de tu hermano, pero me fui antes-- dijo y automáticamente recordaste la charla, ahora te sentías más que bien por haberlo llamado a tiempo. Sonreiste y besaste sus labios--

- menos mal, estás muy lindo-- dijiste riendo, el besó tu cuello haciéndote cosquillas con su barba-- hey, basta de cosquillas -- dijiste y el se separó--

-¿cosquillas no?-- dijo y negaste haciendo un puchero, uno que lo hizo sonreír.

-te queda lindo el rosario-- dijiste sacando de adentro de la camisa uno de madera--

-¿te gusta? -- preguntó y asentiste. Automáticamente se lo sacó, para luego ponértelo a vos--

-hey...Es tuyo-- dijiste sonriendo--

-ahora es tuyo-- dijo y vos lo besaste--





Y ahora....Sus labios eran tu nueva adicción, una de la que no ibas a salir ilesa.

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Capítulo 41

La chica, de la cual no sabías ni siquiera su nombre porque no te interesaba saberlo tampoco, te mostró el camino hacia el baño, así que caminaste hasta allí, evitando a todos los que querían invitarte a bailar, ya no estabas de ánimo para salir, lo único que querías era irte de allí, ir a tu casa y sacar 'Luna y su amiga', si es que estaban allí.



Suspiraste mientras entrabas, prendiste la luz y te acercaste al espejo. Bueno, esto era absolutamente nuevo para vos, no estabas preparada para escuchar todo lo que esa chica dijo ni tampoco para sentir lo que estabas sintiendo ahora.



 Tomaste tu celular y miraste la última conexión de Pedro, aún no se había vuelto a conectar y ya estabas pensando en lo peor, querías morir.


'¿Pepe?' 


Enviaste al mismo tiempo que rezabas por dentro para que te contestara rápido, no sabías porque lo hacías, en fin, no tenías ningún motivo para ponerte así, ¿y solo porque una chica a la cual no habías visto nunca en tu vida te dijo que había alguien que estaba detrás de Pedro?, mordiste tu labio inferior y te recostaste contra la puerta, en ese momento, tu celular vibró.





'hermosa, acá estoy'.




Respondió el y sonreiste mínimamente, te gustaba demasiado que te dijera de esa forma.






'ya me aburrí...quiero que vengas a buscarme'





Enviaste, y ya no te importaba nada, ni tus amigas, ni está fiesta asquerosa ni nadie. Lo único que querías hacer, era estar entre sus brazos, que te dedicara una sonrisa, que te hiciera reír, en fin.

Querías estar con él, te arrepentias soberanamente de haberlo rechazado cuando desde un primer momento te dijo que quería hacer algo con vos.







'estaba esperando este mensaje desde que me dijiste que ibas a salir jajajaja, decime donde que ya te busco '





Sonreiste y le enviaste tú ubicación.



'estoy saliendo, espérame '





Respondió al cabo de unos pocos segundos.

Tu pulso comenzaba a acelerarse con anticipación y esa sonrisa tan característica tuya que se había vuelto costumbre desde que estabas con Pedro, apareció en tu cara.

Saliste del baño pensando en que ibas a hacer cuando lo vieras, pero en ese momento, tus amigas te detuvieron devolviéndote a la realidad.






-¡Gorda! Te estábamos buscando -- dijo Naiara--

-ah, ¿se acordaron de mi? -- preguntaste con ironía, intentaste sonar graciosa pero sonaste molesta, y de alguna forma lo estabas--

- y si desapareciste -- dijo Camila, con su labial corrido. Rodaste los ojos--

-estuve como mil horas ahí sentada con una mina que no conocía, y me pudrí, me voy -- dijiste y seguiste caminando hasta el patio, donde antes estabas, pero ambas te volvieron a detener--

-¿que te pasa enferma? ¿porque te querés ir? -- preguntó Naiara--

- esto es un embole, no iba a estar sola toda la noche, así que me vienen a buscar-- dijiste encogiendote de hombros--

- pero si no estás sola gorda -- dijo Camila suspirando-- no me di cuenta, dijimos que íbamos a venir juntas y que no nos íbamos a cortar, perdón-- dijo ella reconociendolo--

-ya está, me embole en serio, ya se me fueron las ganas-- dijiste--

-¿y ahora te enojas? Nosotras no te dijimos nada cuando subiste a tu cuarto con Pedro-- dijo Naiara molesta--

-¿se los pedí? Ustedes estaban juntas, yo estaba sola. Y no me vengas con eso porque sos la menos indicada para reprocharme algo, ¿cuantas veces salimos por vos cuando ninguna de las dos quería hacerlo?, Así que no me vengas a decir nada Naiara -- dijiste y está vez enojada, no era la idea terminar de esta forma, pero ya no podías evitarlo--

-chicas basta, vinimos a pasarla bien -- dijo Camila--

-me chupa un huevo a lo que vinimos, yo ya me voy -- dijiste, cambiando de rumbo y dirigiéndote hacia la puerta de entrada.

-Gorda, para -- dijo Camila, detrás tuyo--

-no, Cami ya fue-- dijiste abriendo la puerta--

-para, ¿quien te viene a buscar? No vayas sola -- dijo ella--

- no te preocupes-- dijiste intentando sonreírle, ella te devolvió la sonrisa--

-perdon, no fue mi intención, dijimos que no íbamos a hacer esto y al final lo terminamos haciendo-- dijo y asentiste, en ese momento, tu celular comenzó a sonar, Pedro estaba llamándote, Camila vio su nombre en la pantalla y te guiñó un ojo-- cuídate, avísame cuando llegues, voy a calmar a la otra fiera-- dijo y te acercaste para saludarla, en ese momento Pepe volvió a llamar y atendiste--







-Pepe-- dijiste mientras salías, afuera, Camila ya habia ido para adentro y miraste a tu alrededor intentando ver su auto--

-Hermosa, estoy cerca-- dijo él--

-yo estoy afuera-- dijiste sonriendo--

- ah, perfecto, estoy a la vuelta, solo llamaba para decirte que estaba llegando -- dijo --

-te espero-- dijiste y cortaste--






Soltaste un suspiro y te cruzaste de brazos para luego recostarte contra la pared y esperar a Pedro, la puerta de la casa volvió a abrirse, y salió un chico.






-¿ Porqué estás acá sola? ¿ibas a entrar? -- preguntó y negaste con la cabeza--

-no,no ya me iba, están viniendo a buscarme-- dijiste, y en eso viste a Pedro estacionar el auto frente a la casa y bajar rápidamente. Reiste internamente porque sabías que lo había hecho por el chico que estaba con vos--

-Hola -- dijo el, acercándose a ustedes--

-hola-- dijiste sonriendo, pero él solo miró al chico que estaba a tu lado--

-¿es tu novio? -- te pregunto-

- sí-- respondió primero que vos, mordiste tu labio inferior y le sonreiste al chico-- vamos, y buenas noches -- dijo el tomando tu mano--

-chau -- le dijiste al chico y el sonrió para luego caminar en la dirección contraria-- que malo sos, pobre chico-- dijiste riendo--

-¿quien era? -- preguntó pegando tu espalda a la puerta del auto--

-que se yo, no se quien es-- dijiste, y el frunció sus labios--  ni siquiera me saludaste -- dijiste y el sonrió para luego pegar su frente a la tuya--

-hola hermosa -- dijo el, vos rodeaste su cuello con tus manos, acariciando su nuca -- tenía muchas ganas de verte-- dijo acercándose a tus labios y besándote--

-yo también-- dijiste abrazándolo--

- subite, vamos a dar una vuelta -- dijo , abriendote la puerta, vos besaste su mejilla y entraste, el cerró la puerta y dio la vuelta para subir --

- ¿a donde vamos?-- preguntaste cuando subieron-

-no sé linda, decime vos, si querés vamos a dar una vuelta, a tomar algo, a casa, no sé -- dijo tomando tu mano y besándola--

-Quiero helado-- dijiste sonriendo, y el sonrió--

-espero que alguna heladería esté abierta--dijo él, riendo y besando tu mano--




Tu corazón no dejaba de latir.


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Capítulo 40

La noche apenas estaba empezando y no veías la hora de irte, los mensajes que estaban mandándose con Pedro, no te dejaban pensar con claridad.


Dejaste tu celular a un lado y te recostaste en el sillón en el que estabas sentada, miraste a tu alrededor intentando buscar a tus amigas, pero al parecer se las había tragado la tierra, y el mal humor estaba luchando con salir de tu interior.








-Hola -- dijo una chica que no conocías, sentándose a tu lado, ella sonrió tímidamente--

-hola-- la saludaste con la misma amabilidad y le devolviste la sonrisa--

-¿te dejaron sola? Vi que llegaste con tus amigas -- dijo y asentiste--

-si,pero estaban saludando a sus novios y desaparecieron-- dijiste intentando parecer divertida--

-que buena amiga-- dijo ella riendo--
¿como te llamas?, Juro que siento que te vi antes o te conozco de algún lado-- dijo y frunciste el ceño--

-no creo...Me llamo Paula -- dijiste --

-¿Paula Chaves? -- preguntó y asentiste con una sonrisa-- ¿sos la hermana de Gonzalo? -- preguntó y volviste a asentir--

-lamentablemente si-- dijiste suspirando y ella rió--

-te vi en su fiesta, de ahí te vi entonces-- dijo y sonreiste, pero no por parecer simpática con ella, sino porque recordaste cuando Pedro te había invitado a bailar por primera vez--

-no me acuerdo haberte visto, pero sí, yo estaba -- dijiste-- ¿de donde lo conoces a mi hermano? -- preguntaste, más por sacar temas que por curiosidad, porque la verdad te chupaba un huevo eso--

- mi amiga está en algo con él, bah.. salieron algunas veces-- dijo--

-ah, mira vos -- dijiste sonriendo y tomaste tu celular--

-fuimos a la fiesta de él por ella digamos. No puedo creer lo lindos que son todos sus amigos -- dijo recostandose contra el respaldo del sillón--

-mmmm -- dijiste riendo mínimamente--

-¿no te gusta ninguno? No puede ser -- dijo y reiste--

- son unos estúpidos todos-- dijiste-- no hay uno que valga la pena en serio-- dijiste y la viste sonreír--

-uh, no conozco a todos, pero otra de mis amigas está enamorada de uno que tiene nombre de biblia-- dijo riendo--

-¿Nombre de Biblia? Que miedo -- dijiste-- no conozco a ningún Moisés por lo menos-- dijiste y ella rio--

- el que lo negó a Jesús, ¿como se llama? -- preguntó y reiste, eras creyente pero hasta ahí--

-¿Que? Que se yo -- dijiste-- Judas, no se -- dijiste--

-pasa que fui a un colegio de monjas che -- dijo riendo-- ¡ahi esta! Me acordé, Pedro se llama-- dijo y tu sonrisa se borró automáticamente--

-¿Que Pedro? --preguntaste con miedo--

- tiene un nombre de apellido también-- dijo y tu pulso comenzó a acelerarse--

-¿Alfonso? -- preguntaste casi en un susurro--

-¡Ese!... Es muy lindo el tambien-- dijo y por dentro estabas que reventabas--

-¿quien es tu amiga? -- preguntaste--

- se llama Kiana-- dijo y apretaste tus dientes, tenía nombre de puta, con eso ya te dijo todo--

-ah, no la conozco-- dijiste intentando parecer normal, pero la bronca estaba carcomiendote por dentro--

- Si, en esa fiesta él la sacó a bailar, y desde ahí la flechó -- dijo ella, feliz por su amiga, y vos estabas a punto de romperle un vaso en la cabeza--

- creo que tiene novia-- dijiste de la nada y ella te miró--

-pero Gonzalo le dijo a Luna que estaba soltero-- dijo ella frunciendo el ceño-- Luna es la que está con tu hermano-- dijo y asentiste--

- me llegó ese rumor hace un par de días-- dijiste mirando tu celular, verificando que Pedro estuviera en línea, pero no lo estaba, su última conexión fue cuando te mando el último mensaje--

-voy a averiguar bien entonces, igual las dos están en una previa con ellos ahora, yo vine con mis compañeras de Hockey -- dijo y tus ojos se abrieron con sorpresa-

-¿en mi casa? -- preguntaste--

- creo que sí, ¿porque? ¿decis que estarán haciendo desastre? -- preguntó divertida--

-seguramente, cuando me fui ya estaban ahi-- dijiste intentando sonreír pero sabías que no lo habías logrado--

- si querés le pregunto a Luna-- dijo sacando su celular--

-no, no. Está bien, está papá en casa, no creo que se pase -- dijiste y ella asintió-- ¿sabes donde queda el baño?-- preguntaste toda nerviosa. Ella se levantó para mostrarte el camino.


Y necesitabas salir corriendo e ir a tu casa ahora mismo.


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Capítulo 39

Subiste las escaleras con tus piernas hechas gelatina, no dejabas de temblar.


Una vez que llegaste a tu cuarto, prendiste las luces y te dirigiste al espejo, para chequear que estuvieras bien presentable para el, sonreiste, porque jamás te hubieras imaginado haciendo esto, pero así era.


La puerta de tu cuarto se abrió a los pocos minutos, y Pedro apareció en escena.









-Hola -- dijiste sonriendole, el cerró sus ojos y puso sus manos en su cintura al mismo tiempo que suspiraba, vos frunciste el ceño--

-hola-- dijo él finalmente-

-¿Que pasa?-- preguntaste acercándote a él, quien se pasó las manos por su cara--

-¿Vas a salir así? -- preguntó mirándote de arriba abajo, vos hiciste lo mismo--

- sí, ¿que tiene? -- preguntaste--

-estas hermosa -- dijo y mordiste tu labio inferior--

-Gracias-- dijiste acercándote un pasito más, el rodeo tu cintura con sus manos y te acercó a él un poquito más--

-por favor cámbiate -- dijo pegando su frente a la tuya y suspirando, vos frunciste tus labios--

-¿por qué? -- preguntaste rodeando su cuello con tus brazos--

-¿Vos viste cómo te miraron todos cuando saliste al patio? Estuve a un pelo de cargarlos a trompadas a todos-- dijo y sonreiste-- no quiero imaginar cómo va a ser en otro lado -- dijo, vos reiste--

-¿celoso? -- preguntaste sonriendo y besando su mejilla--

-mas de lo que quiero admitir, me voy a volver loco-- dijo escondiendo tu cara en su cuello, vos sonreiste, el dejó un beso en tu cuello, luego se separó y te miró-- ¿a donde vas?-- preguntó y reiste una vez más--


-Todavia no sé, tenemos una previa con unos amigos-- dijiste y el te miró--

-¿que clase de amigos?-- preguntó y mordiste tu labio inferior--

-amigos, no hay otra definición-- dijiste encogiendote de hombros, el hizo una mueca y besaste sus labios. Reiste cuando viste que se los habias dejado marcados con pintura.  Con tus dedos intentaste limpiarlo--

-¿en qué vas? -- preguntó--

-En taxi con las chicas-- dijiste y el asintió--

-las puedo llevar si quieren, vine con el auto-- dijo y sonreiste-

-Gracias bombón, pero se van a dar cuenta que no estás, otro día nos llevas -- dijiste y volvió a esconder su cara en tu cuello--

-no quiero que te vayas -- dijo y reiste para inclinarte y besar su cuello también, el cual estaba impregnado con su perfume--

-mmm-- dijiste y el se separó-

-¿me das un beso? -- preguntó y mordiste tu labio inferior para acercarte y besar sus labios. El te apretó contra su cuerpo y lo hizo más profundo, cuando la falta de oxígeno se hizo presente, tuvieron que separarse. Reiste al ver su boca de color rojo oscuro-- ¿que? -- dijo y tomaste su mano para guiarlo hacia el espejo, el frunció sus labios y se tiro un beso a si mismo-- estoy muy lindo, me va este color -- dijo haciéndote reír--

-estas hermoso-- dijiste y el te dió un beso en los labios--

-dame un beso más y ayúdame a sacarme esto -- dijo y volviste a abrazarlo para poder besarlo--





Luego lo llevaste al baño para poder sacarle la pintura de la cara, sus manos estaban en tu cintura y no dejaba de mirarte la boca, simplemente sonreias, no podías hacer otra cosa.







-estoy terminando de limpiarte, deja de mirar mi boca porque te voy a ensuciar de nuevo-- dijiste divertida y el sonrió--

-no me molestaría-- dijo y en ese momento comenzó a sonar tu celular. Era Camila, de seguro ya querían irse--

-me tengo que ir -- dijiste y el hizo un puchero para besar tu mejilla--

-¿hay alguna posibilidad de que te pongas algo no tan cortito? -- preguntó todavía teniendote cautiva entre sus brazos, vos reiste--

-posibilidades hay, pero no quiero, me gusta -- dijiste y el suspiró--

-prometeme que no vas a dejar que nadie te toque -- dijo serio, vos mordiste tu labio y asentiste--

-te lo prometo -- dijiste y el sonrió para besar tu cuello--

- sos mía -- dijo abrazandote-- y desde ya te aviso, que el próximo finde salimos juntos-- dijo y reiste--

-okey-- dijiste para separarte-- anda que se van a dar cuenta, me voy a arreglar el maquillaje-- dijiste y el asintió para darte un último y sentido beso en la mejilla--

-portate bien... Háblame después, ¿si?-- dijo y asentiste-- cuídate hermosa -- dijo antes de salir de tu cuarto y dejar su perfume en el aire del mismo.





Te arreglaste rápidamente el maquillaje, luego saliste de tu cuarto y bajaste las escaleras para encontrarte con tus amigas, sentadas en el sillon hablando entre ellas.







-¡Por fin!-- dijo Camila tirando su cabeza para atrás, vos reiste--

-nena ¿que mierda estaban haciendo? No salían más-- dijo Naiara y te sentaste a su lado--

-¿pidieron el taxi? -- preguntaste--

-si, pero respóndeme lo que te pregunté, ¿que estaban haciendo picarona? -- te dijo y reiste--

-nada imbécil, un par de besos -- dijiste encogiendote de hombros-- tardamos porque le dejé los labios pintados y lo estaba limpiando nada más -- dijiste y ellas rieron--

-muero con ustedes dos juntos, son hermosos -- dijo Camila y mordiste tu labio inferior--

-me pidió que me cambiara porque la pollera estaba muy corta -- dijiste riendo--

-ah listo -- dijo Naiara y reiste--

-pero no te cambiaste-- dijo Cami--

 - ni en pedo, me re gusta esta pollera -- dijiste y ellas rieron. En ese momento escucharon la bocina del taxi, y se pusieron de pie para salir de tu casa, antes de hacerlo, miraste una vez más hacia el patio, Pepe estaba sentadito entre sus amigos pero con su su vista clavada en vos. Le tiraste un beso y seguiste con tu camino.






Las tres se dirigieron a la casa donde se haría la previa, el dueño de la casa era el mejor amigo del novio de Camila, así que las invitaron a ustedes.

El chico con el que Naiara estaba saliendo también estaba ahí, no por casualidad estaban presentes, reiste para vos, en ningún momento te contaron los planes con lujo de detalles.


El taxi las dejo en la puerta, y la música podía escucharse desde afuera, los anfitriones salieron a recibirlas, y con eso te referías al novio de Camila y el chico de Naiara, las saludaron amablemente y las invitaron a pasar.


Había mucha gente, bah, eran todos hombres, con suerte habían 2 o 3 chicas más. Suspiraste por dentro, iba a ser una larga noche, ojalá termine rápido y puedan irse al boliche, con solo ver a la gente ya te había agarrado un 'bajón'.


Ni bien pusiste un pie dentro del patio de la casa, tus amigas se perdieron, dejándote absolutamente sola, rodeada de gente que ni siquiera conocías.

Lo único que hiciste fue sentarte y tomar tu celular, pero ni eso podía salvarte, Pedro no te había escrito ningún mensaje.







-Hola hermosa...¿te dejaron solita? -- preguntó un chico, que dicho sea de sento a tu lado como si nada. Solo le sonreiste y asentiste-- ¿queres tomar algo? -- preguntó y negaste-

-no todavía, gracias-- dijiste--

-estas muy linda-- dijo y volviste sonreirle-- no sabía que Cami tenía amigas tan lindas-- y las ganas que tenías de dejarlo hablando solo eran muchas.

-Gracias-- dijiste, y en ese momento y como si lo hubieras llamado con el pensamiento, Pedro te habló--

-¿tenes novio? -- preguntó, y despegaste la vista de la pantalla, que directo--

-si-- dijiste y volviste tu atención al celular, automáticamente se levantó y se fue. Sonreiste, gracias a Dios se fue--




'¿como la estás pasando?'

'acabamos de llegar y ya me dejaron sola. Creo que con eso te digo todo ajajajaja '

'¿como que te dejaron sola? ¿donde estás?'


' en una previa de unos amigos del novio de Camila, y el novio de Naiara también está acá'

' ¿y porque no me llevaste a mi? 💔'

' de haberlo sabido te traía conmigo te juro '

'puedo ir ahora sí me lo pedís'

' se que podés, pero voy a esperar un ratito. Juro que cuando pasa esto me dan unas ganas de irme terribles'

' cuando te aburras, decime que en cinco estoy ahí. Me dejaste con ganas de estar con vos'


Sonreiste como estúpida.


' si, me estoy arrepintiendo jajajaja'

'no podés decirme eso cuando ni siquiera se donde estas, mala 😭'

' ajajajaj ¿y si te digo que te llamo después me creés?'

'hasta que no lea tu mensaje con un 'venime a buscar' no te creo nada jajaja'

' más tarde te aviso eh....espero que estés despierto'

' voy a estar esperando tu mensaje linda ❤'


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Capítulo 38

Efectivamente, eran tus amigas quienes habían llamado para avisarte que estaban abajo esperando a que les abrieras la puerta, les habías pedido que no tocaran timbre, y que solo te llamarán.

Terminaste de peinarte rápidamente y bajaste las escaleras a velocidad luz para abrirles, reiste al verlas con un enorme bolso a cada una, parecía que iban a irse de vacaciones, cuando ni siquiera creías que se queden a dormir, solo traían mucha ropa para elegir la adecuada para esta noche.

Las tres subieron a su cuarto y una vez que estuvieron dentro, Camila y Naiara se tiraron en tu cama como dos morsas, vos reiste y te acercaste al espejo.






-¿porque tardaste tanto en abrir imbécil? Casi nos violan -- dijo Naiara y vos reiste--

-que exagerada de mierda, fue un segundo. Me estaba bañando y salí corriendo por ustedes -- dijiste defendiéndote, reiste y caminaste hasta el espejo para poder secar tu cabello, tarea que habías dejado de lado en cuanto llamaste y escuchaste la voz de Pepe-- ¿ustedes ya comieron? -- preguntaste por las dudas, porque vos ya habías cenado con tu papá y tus hermanos, ellas asintieron y solo prendiste el secador--







Una vez que terminaste, te sentaste en tu cama, junto a Camila que estaba acostada y abrazando a tu chanchito de peluche.







-¿Ya sabes que te vas a poner? -- preguntó Naiara mientras se ponía a revolver todo lo que tenía dentro del bolso que había traido--

-no tengo ni la más puta idea...Encima hace calor -- dijiste y Camila te sonrió--

-esta re linda la noche-- dijo ella y asentiste de acuerdo. Naiara bufó con bronca y se sentó en la cama junto a ustedes. Vos las miraste a ambas, y por dentro pensabas que era la hora de que soltaras toda la verdad, se pondrían como locas en cuanto lo supieras, y hasta habia una pequeñisima posibilidad de que se enojaran con vos, las dos fruncieron el ceño al ver que las mirabas seriamente--

-¿Porque nos miras así enferma? -- dijo Naiara--

-ay si...Que miedo -- dijo Camila y las golpeaste con la almohada--

-por nada idiotas -- dijiste riendo-- colgué -- dijiste y ellas fruncieron sus labios exageradamente haciéndote sonreír, vos tomaste aire-- tengo algo para contarles -- dijiste y ellas te miraron--

- y habla pelotuda-- dijo Camila--

-pero  jurenme que  por el amor de Dios no van a gritar ni hacer un escandalo-- dijiste suplicandoles con tu mirada--

-¡Habla ya! ¡Ahora Paula!-- dijo Naiara--

-jurenmelo-- dijiste señalandolas --

-¡Te lo juramos! ¡Habla gila!-- dijo Camila y tomaste una respiración profunda--

-estoy en algo con Pepe-- dijiste y las viste abrir sus bocas sorprendidas. Al instante sentiste como las dos se tiraban encima tuyo, para gritar como locas tapándose sus bocas una a la otra-- ¡Sh! ¡callense carajo! -- dijiste riendo, y automáticamente recibiste miles de golpes por parte de ellas--


-porque mierda nos estamos enterando ahora...pelotuda de mierda-- dijo Camila levantándose y sonriendo--

-es que ni siquiera yo puedo caer todavía, no sé....Me tiene loca chicas-- dijiste y Naiara mordió su labio inferior--

-¿cual es la novedad? -- preguntó--


-solo que que de a poquito estoy volviendo a caer por el-- dijiste suspirando--

-¡me muero! ¡me muero! ¡contanos todo ya! -- dijo Camila y reiste para luego comenzar con tu relato--







Les contaste todo lo que había pasado en esta última semana, la más linda de tu vida quizás. Una historia breve pero no por eso dejaba de ser hermosa para vos.

Tus amigas se mostraban muy felices por la reciente noticia, habían admitido que no se lo esperaban para nada y que las habías sorprendido, obvio las entendías... Pues estabas igual que ellas, no caías del todo y tardarías un poco más en caer.

Ahora mismo, las tres estaban terminando de cambiarse, mientras te hacían chistes sobre Pedro, vos no dejabas de reír, y es que hace una semana era lo único que hacías, sonreír y reír por todo.







-¿sabe que salís? -- preguntó Naiara mientras se maquillaba frente al espejo--

-si, le dije. Me llamó hace un rato, y me dijo que quería que hagamos algo esta noche, pero tuve que decirle que ya tenía planes -- dijiste mientras terminabas de abrocharte las sandalias con plataforma negra y te ponias de pie-

-¡¿y porqué hiciste eso estúpida?! -- dijo Camila--

-y porque ya dijimos que íbamos a salir...Además las conozco, si les decía que no, las dos se iban a enojar-- dijiste riendo--

- pobre pibe-- dijo Naiara y reiste-- ¡Estas re potra!-- dijo ella y diste una vueltita para ellas, te habías puesto un top negro y una pollera cruzada de color negro también, amabas el negro y contra eso no había con que darle. En ese momento escucharon música, vos sonreiste porque sabías perfectamente de donde venía--

-¿Tus vecinos hacen previa?-- preguntó Cami--

-no, es mi hermano-- dijiste--

-¿y porque no avisas? -- dijo indignada--

- y porque vamos a lo de los chicos. Además, vos misma quisiste ir, y me enteré hace un rato-- dijiste y las dos te miraron mal--






Al cabo de un rato, las tres estuvieron listas y bajaron para poder llamar a un taxi. Gracias a Dios el living estaba desierto, porque de lo contrario, esos salvajes destruirían la casa.

 Escuchabas las risas y charlas que venían desde afuera. La puerta del patio estaba cerrada, pero de igual forma podías ver a través del vidrio lo que pasaba afuera.


Los amigos de Gonzalo estaban e. Una rondita junto a la pileta, jugando a las cartas y riendo. Pero eso no te importaba, porque tus ojos solo buscaban a una persona, y esa persona, estaba con una camisita bordó que le quedaba hermosa. Mordiste tu labio inferior, al ver a Pedro sentado entre todos.





-ahi está chicas-- dijiste y ellas miraron disimuladamente hacia afuera-- está hermoso-- dijiste sonriendo--

-inventa algo para salir afuera y que te vea-- dijo Camila--

-eso Paula, ¡anda y que te vea! Quiero filmar su cara cuando lo haga -- dijo Naiara y reiste-- pregúntale algo a Gonzalo o decile que te vas, no se-- dijo-

-le chupa un huevo lo que haga a Gonzalo, ¿que le digo? -- dijiste riendo--

-no sé, inventate algo por el amor de Dios y salí afuera -- dijo Camila y reiste--

- capaz le pregunto donde me dejó las llaves, porque se las presté -- dijiste y ellas sonrieron--

- si, si...Lo que sea, andá -- dijeron empujandote, vos reiste y miraste tu celular antes de salir, no tenías ningún mensaje por parte de él--





Tomaste aire profundamente y  abriste la puerta corrediza para poder salir al patio. Las musica estaba muy fuerte y aún así se escuchaban las risas de todos.



-¡Gonzalo! -- gritaste intentando llamar su atención mientras te acercabas a el, pero de repente, el volumen de la música bajó, y el silencio se hizo presente en el patio, todas las miradas masculinas se posaron en vos-- Hola-- saludaste en general y todos respondieron con entusiasmo a tu saludo, simplemente lo ignoraste y volviste tu atención a tu hermano-- ¿donde mierda dejaste mis llaves?-- preguntaste y el te miró con el ceño fruncido para luego buscar en su bolsillo y sacarlas. Tu mirada se desvió a Pedro, quien estaba mirándote pero no tenía ninguna expresión en su cara.
 Gracias a Dios tu excusa funcionó de maravilla--


- ¿a donde vas? -- preguntó duramente--

-queti -- respondiste riendo y besaste su mejilla para saludar y volver hacia la casa. Sentías miles de ojos clavados en tu espalda pero no te importó. Finalmente llegaste adentro y las chicas te miraban con la boca abierta.


-¿vos viste como te miraban todos? Que hija de puta -- dijo Camila y vos reiste--

-Pedro está a punto de reventar... Si hubieras visto su cara cuando apareciste, era un poema -- dijo irónicamente y vos mordiste tu labio inferior. En ese momento tu celular vibró con la llegada de un mensaje, y sonreiste cuando viste de quién se trataba, era Pepe.


' quiero que vayas a tu cuarto, AHORA'




Le mostraste el mensaje a tus amigas y ellas casi que te empujaron hacia las escaleras, prometiéndote que esperarían abajo.

Tu corazón latió con fuerza y estabas a punto de morir de ansiedad.

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