Capítulo 46

Seguían parados frente a tu hermano, y tomados de la mano fuertemente.






-¿Pedro? -- preguntó el, mirándolos fijamente, a ustedes no, sino a sus manos unidas--

-¿Podemos sentarnos? -- preguntaste y el asintió para luego darse la vuelta y caminar hacia el living--

-¿me pueden explicar que mierda está pasando? -- dijo una vez en el living, pero no se sentó, sino que quedó parado a un lado del sillón, con sus manos en su cintura--

-si...Yo te lo voy a explicar-- dijo Pedro, suspirando y soltando tu mano suavemente--

-solo te pido...que no grites-- dijiste  y te quedaste parada junto a Pepe, quien estaba más nervioso que nunca--

-Gonzalo... me hubiese gustado hacer esto solo, porque es algo que tenemos que hablar vos y yo también, pero las cosas se están dando así, y bueno-- dijo él y miraste a tu hermano, quien pasaba sus ojos de uno al otro--

-¿Paula? -- te preguntó a vos, vos miraste a Pedro y el negó con la cabeza, serías vos quién lo dijera --

- Pedro y yo estamos en algo-- dijiste y te acercaste más a él para tomar su mano--

-¡¿que?! -- dijo mirándolos como si ambos tuvieran tres cabezas. Luego comenzó a reír-- dejen de joder, casi me da un ataque...No es bueno que aparezca muerto en el día de mi cumpleaños-- dijo riendo, Pedro te miró y el suspiró--

-es verdad Gonzalo, estamos en algo hace un par de semanas -- dijiste y automáticamente su sonrisa se borró, lo viste apretar sus puños y--

- ¡Diganme que es una joda! ¡Decime que es una joda!-- dijo apuntando a Pedro--

-no lo es Gonzalo-- dijo y viste a tu hermano pasarse las manos por su cara--

-¡Vos más que nadie sabes cómo son las cosas! ¡Dije hasta el cansancio que con mi hermanita no! ¡¡ No vas a jugar con ella!!-- dijo acercándose bruscamente, y lo hizo tan rápido que ni siquiera pudiste reaccionar cuando lo agarró de la camisa--

-¡No voy a jugar con ella! La quiero-- pudiste escuchar que le dijo algo agitado, ahora mismo lo arrinconó contra la pared--

-Gonza...¡Gordo para por favor!-- dijiste tomando su brazo, intentando que lo soltara--

-andate Paula...Esto no es con vos-- dijo enojado, y sentías unas ganas terribles de llorar--

-gordo para, por favor -- dijiste con tus ojos húmedos--

-¡Andate carajo!-- dijo enfurecido--

-anda Pau, por favor -- pidió Pedro y negaste con la cabeza-- por favor, anda, solo vamos a hablar-- dijo el, mirando a Gonzalo, quien le dió un golpe terrible a la pared--

-¡Anda gorda! Por Dios andate...-- dijo Gonzalo agarrándose los pelos. Miraste una vez más a Pedro, quien asintió.






Vos suspiraste y te diste la vuelta para dirigirte a las escaleras, y antes de hacerlo, te escondiste en la cocina, debajo del desayunador, te recostaste contra la pared y abrazaste tus rodillas, pidiéndole a Dios que tú hermano no golpeara a Pedro.








- no te imaginas las ganas que tengo de partirte la cara ahora mismo-- dijo con toda la bronca del mundo--

-solo te pido que me dejes explicarte, después podes hacer lo que quieras -- dijo Pedro. Lo próximo que escuchaste fueron pasos y luego se sentaron en el living--

-Habla...Y dame una buena razón para no matarte-- le dijo--

- la quiero -- dijo y tu corazón latió con fuerza en tu interior-- tiene que ser motivo suficiente. Sabes muy bien que jamás la lastimaría, nunca lo hice, siempre la cuidé como si fuera hermana, pero ahí estaba el tema porque nunca la vi de esa forma...Y eso es algo que también sabés-- dijo Pedro, y estabas a punto de escupir un pulmón--


-Vos y yo sabemos que era un capricho de cuando eras pendejo, en esa oportunidad te dije que no te volvieras a acercar a ella-- dijo Gonzalo y frunciste el ceño--

- y lo hice...Lo hice por vos, pero nunca lo hice por mi, porque jamás fue un capricho mío-- dijo él, con esa calma que lo caracterizaba--

- ¡Paula tenía trece años por Dios! Estabas a punto de ir a la facultad, ¿que mierda se te cruzaba por la cabeza? ¿creias que iba a dejarte que la ilusionaras? ¿para que después te fueras y la dejaras llorando por vos? -- preguntó y todos tus sentidos se pusieron alerta--

- yo la quería de todas formas, y si tan solo me hubieras dado la posibilidad de intentarlo, me hubiera quedado, por ella-- dijo y tu corazón dejó de latir, no entendías nada. Absolutamente nada--

- no me importa lo que hubieras hecho Pedro, pero de ninguna manera voy a dejar que la lastimes-- dijo Gonzalo--

-No la voy a lastimar... quiero hacerla feliz-- dijo y mordiste tu labio inferior para luego sonreír--

-te juro que si no estuvieramos hablando de mi hermana, me cagaría de risa en tu cara por las estupideces que estás diciendo...Pero las ganas de querer golpearte me superan-- dijo tu hermano--

-Si tenés ganas, hacelo, pero no voy a dejar de quererla, ni tampoco voy a hacer lo que me digas. Está vez no-- dijo él--

- ¡es una nena! ¡solo quiero que veas eso!-- dijo --

-es así como la ves vos, Paula ya es toda una mujer, y creo que puede decidir lo que quiere hacer -- dijo Pedro--

- eso no te lo discuto...pero no deja de ser mi hermanita-- dijo Gonzalo, y podrías abrazarlo toda una vida--

- necesitas hablar con ella también, quiero que sea ella quien te saque las dudas que tenés sobre mi. Porque de verdad que la quiero, y Dios sabe que la quise toda mi vida -- dijo y estabas pasando por todas las emociones del mundo--

-Solo...Déjame procesarlo, no quiero imaginarlos juntos-- dijo y sonreiste-- no la puedo imaginar con nadie-- dijo-

- te dejo procesarlo todo lo que quieras...Pero no voy a cambiar de opinión, quiero a Paula, y voy a hacer todo por verla feliz. Y también me voy a encargar de que sepa todo lo que hice por ella, y que por tantos años te llevaste todo el crédito-- dijo el, y por primera vez escuchaste reír a tu hermano--

-¡No! Déjame seguir siendo su héroe-- dijo y ambos rieron--

-de verdad la quiero Gonzalo, no la voy a lastimar. Dame un voto de confianza para demostrartelo, ella ya me lo dió-- dijo y sonreiste--

- te juro por mi vida  que si la veo derramar una lágrima por vos, mejor amigo o no, no voy a dudar ni un solo segundo en arrancarte las bolas, y dárselos a Bady para que las coma -- dijo y reiste--

- no va a ser necesario... Te lo prometo, la voy a cuidar mucho -- dijo Pedro, haciéndote morir de amor--

- eso espero...-- dijo-- así que ahora me merezco un regalo si vas a ser mi cuñado -- dijo y ambos rieron--

- sos el único que no regala nada, no todos somos como vos-- dijo y escuchaste las palmadas en la espalda, típica del abrazo de hombres. Y sentiste que el alma te volvió al cuerpo--¿Puedo saludarla antes de que se vaya a dormir? -- preguntó--

- no te pases Alfonso--dijo Gonzalo. Y rápidamente te dirigiste a las escaleras para dirigirte a tu habitación-




Una vez que entraste, cerraste la puerta detrás tuyo para largar un suspiro. Lo peor ya había pasado.




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Espero que les guste la historia!!! COMENTEN COMENTEN❤❤❤❤❤


(más de 12 comentarios y con nombre de Twitter y mañana me tienen nuevamente)