Capítulo 51

Cuando el almuerzo familiar llegó a su fin, cada uno de los integrantes de tu familia comenzó a despedirse. Tu papá te había dicho, que se quedaba con tus abuelos y con Beltrán allí, dándote el mensaje subliminal de que quedabas a cargo de la casa.


Pedro y ofreció ir con él en su auto, así que tuviste que darle las llaves del tuyo a Gonzalo y rezando internamente para que no le hiciera ningún rasguño.


Una vez en el silencio del auto, y con Pedro tomando tu mano, pudiste soltar un suspiro, seguido de una sonrisa.







-¿y? ¿la pasaste bien? -- preguntaste girando tu cabeza, él sonrió de costado--

- al principio creí que iba a morir, pero por suerte después me relajé-- dijo y besaste su mano-- gracias por presentarme a tu familia-- dijo y sonreiste--

- de nada...Me encantó haberlo hecho-- dijiste y el sonrió. Luego prendiste la radio con tu mano libre, y comenzaste a cambiar.

-¡Dejala ahí!-- dijo él y te detuviste. Era la voz de una mujer, y reconocias esa canción. Era la de la película de "Bridget Jones's", era Ellie Goulding. Sonreiste--

-¿te gusta esa canción? -- preguntaste--

-mire la película-- dijo y sonreiste-- además me ayudó con unos truquitos -- dijo guiñándote un ojo, vos reiste--

-¿Que truquitos? -- preguntaste y el sonrió. Luego el subió el volumen, automáticamente se te vinieron a tu cabeza todas las notitas, lo miraste y el sonrió. Mordiste tu labio inferior--  te quiero-- dijiste y el tomó tu mano para llevarla hacia su boca y besarla--

-yo también, muchísimo-- dijo el,  y te acomodaste en el asiento-- por fin te voy a tener pegadita a mi toda la noche-- dijo y reiste--

-mmm no se si eso es bueno o malo-- dijiste sonriendole--

- más que bueno-- dijo y ambos rieron--






En eso llegaron a tu casa y tuvieron que despedirse, obviamente prometieron verse más tarde. El queria aprobar tu look, por supuesto que no lo iba a hacer, pero bueno, era mejor que se quedase con esa idea que lo hacía feliz.

Pedro te dió un beso, uno tan lindo que iba a durar hasta que volvieran a verse.



Entraste a tu casa respirando aire puro y perfumado, y disfrutando del silencio que reinaba antes de que estuviera estallada de gente, porque sabías que todo Buenos Aires asistiría. Ni bien pusiste un pie en tu cuarto, te tiraste en la cama para poder descansar un poco, tenías que reponer energía si querías cuidar tu casa, y ponerle pilas a la noche.



Despertaste cerca de las 20:00 de la noche, a causa de los gritos de tus amigas que saltaban encima tuyo. Tuviste que levantarte a la fuerza, les habías contado poco y nada por Whatsapp todo lo que había pasado, ahora querían lujo de detalles.


Por supuesto que contaste todo, eras la más feliz del mundo y no podías ocultar la sonrisa que tenías en tu cara. Ellas también se pusieron felices por vos, aunque una de ellas estaba muy apagada, a Camila le pasaba algo, efectivamente algo sucedía y terminaste por confirmarlo cuando les contó que se había peleado con su novio, era algo muy común últimamente, pero ella era tan buena, que a veces...Se olvidaba de su propio bienestar.


Naiara y vos intentaron animarla lo más que pudieron, y te picaba la lengua por contarle que a tu hermano le gustaba ella, pero tenías que callar.

Las tres pidieron comida y cenaron mientras decidían que ponerse. Vos optaste por un vestido negro, por delante sin ningún tipo de escote, llegaba hasta el cuello, pero con espalda totalmente descubierta.

No ibas a aguantar mucho, necesitabas que Pedro te viera, sonreiste, jamás habías imaginado que intentarías arreglarte para gustarle a alguien, pero  así era.




La noche llegó rápidamente, y la música ya estaba sonando, tus amigas estaban terminando de maquillarse y vos estabas trayendo a tu cuarto la cucha de Bady, para que no escapara.

Por supuesto que ya estabas lista, lo único que faltaba era que tus amigas terminaran para poder bajar.








-¿listas? -- preguntaste perfumandote--

-listas -- dijo Naiara sonriendo y Camila intentando sonreír también. Te despediste de Bady y salieron de tu cuarto--





Las tres bajaron las escaleras, tu casa ya estaba llena de gente, la mayoría eran hombres, o por lo menos no habías visto a ninguna mujer...todavia. No es que querías verlas tampoco, pero bueno.

Tu hermano estaba en la cocina rodeado de sus amigos quienes preparaban las bebidas, tu mirada solo buscaba a Pedro, y es que no estaba por ningún lado.

Gonzalo al verte sonrió.






- mocosa, ¿que van a tomar? -- preguntó el y sonreiste para mirar a tus amigas y llamarlas. Las tres se acercaron--

- fernet, y no lo hagas tan puro porfa. Tengo que cuidar la casa porque no voy a contar con vos-- dijiste y todos sus amigos rieron--

-estaba por servirte Coca-Cola solamente, no podés tomar alcohol-- dijo y mordiste tu labio inferior--

-espero que hayas guardado todas las cosas que puedan romper -- dijiste y el asintió--

- si, lo hice -- dijo y les pasó un vaso a cada una, y pudiste notar que le regaló una sonrisa muy especial a tu amiga. Vos le guiñaste el ojo disimuladamente y tomaste tu vaso--





Las tres siguieron su camino hasta el patio, donde estaba llenándose de a poco, y vos no parabas de buscar a Pedro, pero el no estaba por ningún lado. Tomaste tu celular para preguntarle dónde estaba, y contesto que tardaría unos minutos más.

Intentaste relajarte pero se te hacia un poco imposible, al ratito Gonzalo y sus amigos salieron al patio, haciendo una especie de 'rondita' con ustedes, donde todos empezaron a bailar, por más salvajes que fueran, eran divertidos, no podías negarlo.

Cómo por arte de magia, y como si tu corazón supiera que el estaba allí, giraste tu cabeza para verlo caminar hacia ustedes.

 Mordiste tu labio inferior al verlo tan lindo, el te miraba de arriba abajo intensamente, tanto que tus piernas comenzaban a temblar.








-Buenas noches-- dijo cuando llegó y todos respondieron animadamente-- Gonzalo, hay gente en la puerta, te juro que no conozco a nadie-- dijo el, divertido y tu hermano rodó los ojos para caminar hacia la puerta de entrada.

-¿porque tardaste tanto? -- preguntó Gastón riendo--

-tuve que hacer unas cosas antes -- dijo sin darle importancia, y todavía no te había dirigido ninguna sola sonrisa. Miraste a tus amigas y te encogiste de hombros-- hola chicas-- dijo el, saludando a Camila y Naiara, y cuando llegó a vos, rodeó tu cintura con un brazo y dejo en beso en tus labios, fue tan repentino que ni siquiera tuviste tiempo de reaccionar. Los amigos de tu hermano se quedaron perplejos pero no emitieron comentarios por el momento.


La noche empezó a transcurrir y perdiste de vista a Gonzalo. En realidad tampoco te importaba mucho, pero hacia rato que no lo veías dando vueltas.

Mientras tanto tus amigas andaban en la suya y vos por supuesto sin despegarte de Pedro, estaban  bailando y divirtiéndose juntos, era la primera vez que lo hacías y podías jurar que te encantaba.






-Ya estoy extrañando tus labios-- dijo Pedro con una sonrisa burlona, vos reiste y ni siquiera te dio oportunidad para que pudieras responderle que ya te partió la boca con un beso de esos que te hacen temblar las piernas y se te eriza la piel.


-¡Che che! ¡la hermanita de Gonzalo no! ¡te va a arrancar los huevos si no es que lo hacemos nosotros antes!-- dijo Sebastián separandolos y levantándole la voz a Pedro

-Ey Pedro te estas pasando de la raya y vos Seba tambien calmate un poco-- dijo Gaston tomando de los hombros a su otro amigo.

-No boludo Gonzalo lo mata a él y nos mata a todos cuando se entere y más si nosotros no lo evitamos.

- No nadie va a hacer nada-- dijiste asustada y todos sus amigos miraban a vos y a Pedro sorprendidos mientras te acercabas a él nuevamente-- mi hermano ya lo sabe-- les dijiste y todos miraron a Pedro--


-¿vos me estás jodiendo? ¡Me aguante mil años el invitarla a salir! ¡¿y no te hizo nada?! -- dijo Gastón y abriste tus ojos, Pedro lo miró mal-- fue un chiste... O no tanto pero, no lo creo-- dijo riendo. En eso llega tu hermano y sigue bailando como si nada hubiera pasado, todos lo miraron como si le hubiera salido una segunda cabeza, el miró a todos--

-Al fin apareces --soltarte suspirando

-¿que pasó? -- preguntó y su mirada termino en Pedro y vos, el sonrio entendiéndolo todo-- ah ya entendí, ¿es por ellos la tensión? -- preguntó señalándolos, mientras que los demás miraban a Gonzalo incrédulos-- bueno, ya lo saben, ojo con mi hermana, mi cuñado se va a enojar-- dijo divertido y sonreiste--




Sus amigos no lo podían creer. Le pidieron disculpas a ambos, felicitándolos de paso y también dejándole muy en claro a Pedro que se comportara, de lo contrario, ellos también se unirian a la violencia de tu hermano.

Abrazaste fuerte a Pedro, le sonreiste y siguieron bailando. Salvo por ese episodio la noche fue perfecta. Era la primera vez que podrías disfrutar de una fiesta, y con él a tu lado.

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